Pese a la integración de sistemas operadores de limpia para la recolección de basura, algunos municipios de la zona metropolitana de Puebla usan diversos espacios a cielo abierto en sus juntas auxiliares como tiraderos clandestinos de residuos sólidos urbanos o de manejo especial, lo cual pone en riesgo la salud y la seguridad de quienes habitan en los alrededores.
De acuerdo con el artículo 104 de la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Puebla, “los municipios tienen a su cargo el servicio público de limpia, recolección, traslado, tratamiento y disposición final de residuos”, enunciado que se refuerza en los artículos 5 y 6 de la Ley para la Protección del Ambiente Natural y Desarrollo Sustentable del Estado de Puebla.
Sin embargo, la mayoría de las demarcaciones cercanas a Puebla capital enfrentan serios problemas para cumplir con la recolección de residuos sólidos urbanos y de manejo especial, ya que varias de sus barrancas, arroyos, laderas o predios baldíos son utilizados como tiraderos clandestinos, aún y cuando ello pudiera causar afectaciones al ecosistema y viola las normas ambientales mexicanas.
MILENIO Puebla consultó el Programa Estatal para la Prevención y Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos y de Manejo Especial del Estado de Puebla, elaborado por la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial (Smadsot) estatal, en el que expone que en la entidad se generan 5 mil 606.17 toneladas de residuos sólidos urbanos por día.
De éstos, 45 por ciento se producen en la capital y la zona metropolitana, con 2 mil 487.83 toneladas por día, las cuales son recogidas mediante 129 camiones de recolección que los envían a los ocho sitios de disposición final identificados en el área, compuesta por Amozoc, Coronango, Cuautlancingo, Juan C. Bonilla, Ocoyucan, Puebla, San Andrés Cholula, San Gregorio Atzompa, San Miguel Xoxtla, San Pedro Cholula y Tlaltenango.
No obstante, esta casa editorial realizó un recorrido por la carretera estatal Cholula-Calpan, que conecta a los municipios de San Pedro Cholula, con una generación de 129.45 toneladas de residuos sólidos urbanos por día; y Calpan, con 6.04 toneladas de residuos sólidos urbanos por día, según la Smadsot.
Ahí, fueron visibles diversas omisiones de los municipios para la correcta recolección, acopio y disposición final de los residuos, ya que varios terminan a la intemperie aún y cuando es su obligación llevarlos a rellenos sanitarios, ya sea de índole público o privado, mismos que en la zona metropolitana de Puebla son obsoletos por su mínima infraestructura y su vida útil está por caducar.
Para el caso de Puebla, la Smadsot tiene 94 sitios aprobados para la disposición final de residuos sólidos urbanos y de manejo especial; no obstante, son insuficientes para brindar un servicio eficiente a los 217 municipios del estado, principalmente, a los que se localizan en el área metropolitana, por lo que algunos de ellos optan por la clandestinidad.
CFE usa a Tlautla para abandonar escombros
A pesar de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) es uno de los organismos que mayor asignación de recursos económicos recibe desde la Federación y cobra tarifas por todos los servicios que presta a los usuarios, su representación en Puebla es incapaz de respetar las normas ambientales federales, estatales y municipales.
Muestra de ello es lo que sucede en la junta auxiliar de San Juan Tlautla, en San Pedro Cholula, donde la paraestatal ha utilizado diversos espacios para abandonar postes de luz antiguos, varillas oxidadas y cascajo.
Así lo pudo documentar MILENIO Puebla mientras recorría la carretera Cholula-Calpan, que en su orilla tiene diversos campos para la siembra de maíz, frijol, calabaza y amaranto, pero que también sirve como “cementerio” ilegal de toda estructura y material que la CFE considera inservibles.
Aún y cuando San Juan Tlautla se encuentra al pie de la Reserva Estatal Cerro Zapotecas, de 536 hectáreas y que sirve como hábitat de algunas aves como la garza ganadera, el tordo, el cardenalito, el halcón peregrino y el pinzón peregrino, así como roedores, pinos, encinos y hongos, la CFE ha visto a la junta auxiliar como el espacio ideal para tratar de ocultar sus omisiones a la Ley para la Protección del Ambiente Natural y Desarrollo Sustentable del Estado de Puebla.
Y es que el basurero clandestino de la CFE, iniciado después de abril de 2021 según fotografías obtenidas vía Google Maps, no solo representa un foco de riesgo para la salud de los pobladores de San Juan Tlautla, sino también para los estudiantes de la Universidad Politécnica de Puebla (UPPue), localizada en San Mateo Cuanalá, en Juan C. Bonilla.
Uno de ellos es Gael, quien todos los días va a pie por un camino de terracería para volver a su hogar, el cual cruza entre ambas comunidades y tiene al tiradero clandestino de CFE como su punto de peligro, principalmente, por las mañanas y las noches.
“Los escombros ya tienen bastante tiempo aquí, vienen los carros y dejan todo aquí, desperdicio de concreto (...) es un tema delicado que nos pone en riesgo tanto como estudiantes como a los pobladores, creo que el gobierno debería tomar cartas en el asunto para tener limpio este lugar”.
Gael urgió a la CFE y a las autoridades estatales y municipales a atender su llamado, ya que los sismos recientes también podrían provocar que las estructuras que sobresalen al pie del camino caigan encima de los estudiantes de la UPPue.
“Es algo serio porque dañan el ecosistema, aquí hay terrenos de riego de maíz, es un poco indignante, ayer (19 de septiembre) de que tembló el concreto se puede venir para abajo, es peligroso para nosotros como estudiantes encontrarnos con esto”.
Pero no es la única omisión de la CFE en la zona, ya que apenas unos 200 metros adelante, afuera de su almacén para resguardar unidades descompuestas, trabajadores de la paraestatal dejaron regados un conjunto de postes y cables sobre un predio privado y sin el consentimiento de sus dueños.
Vecinos de TR3S Residencial, un conjunto habitacional frente a las instalaciones de la CFE en San Juan Tlautla, acusaron que no es la primera ocasión que la Comisión se desentiende de material que retiró en otros lugares, dejándolo sobre un terreno aledaño que sirve para sembrar maíz o al pie de la carretera, impidiendo que vehículos y unidades de transporte puedan circular con normalidad.
Socavón, también con basura
A unos 500 metros de donde se encuentra el socavón de la junta auxiliar de Santa María Zacatepec, en Juan C. Bonilla. MILENIO Puebla también halló una pequeña depresión cuyas laderas son utilizadas por camiones para descargar cascajo y basura procedente de localidades cercanas.
Mediante un recorrido fue posible observar distintos tipos de desechos, tanto sólidos urbanos como de manejo especial, los cuales se extienden por todo el predio y, a decir de vecinos, con aprobación irregular de las autoridades municipales que no han atendido sus reclamos.
La situación se agrava teniendo en cuenta que alrededor del tiradero clandestino de desechos hay 10 viviendas, las cuales no solo enfrentan la preocupación de perder su patrimonio si es que el socavón que apareció en mayo de 2021 continúa expandiéndose, sino también por la concentración de basura que hay en su entorno inmediato.
De acuerdo al Programa Estatal para la Prevención y Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos y de Manejo Especial del Estado de Puebla, elaborado por la Smadsot, el municipio de Juan C. Bonilla es de los que menos basura genera al día entre los que integran la zona metropolitana, con un promedio de 15.57 toneladas cada 24 horas; sin embargo, el ayuntamiento carece de camiones recolectores propios y de un centro de disposición final de residuos sólidos urbanos.
En Tehuacán clausuran patio de maniobras
Personal de la Procuraduría Federal de Protección del Ambiente (Profepa)clausuró un predio que era ocupado como patio de maniobras para el almacenamiento de residuos sólidos urbanos de Tehuacán.
Funcionarios acudieron a la junta auxiliar de San Marcos Nexcoxtla, donde vecinos que presentaron la denuncia presenciaron cuando fueron colocados los sellos de clausura. La medida aplicada se dio porque los vecinos acusaron que la permanencia de residuos puso en riesgo los mantos acuíferos.
Sobre este tema, el presidente municipal Pedro Tepole Hernández declaró que ese patio de maniobras ya no era ocupado como sitio para la acumulación de residuos sólidos urbanos desde la semana pasada y ya se limpia.
AFM