Un joven de 26 años de edad, que siempre se mantuvo sentado en las vías del ferrocarril en Gómez Palacio, pese a que se dejó escuchar el silbato de la máquina, fue arrollado de manera brutal resultando con graves contusiones en cráneo y diferentes partes del cuerpo, que terminaron con su vida en el lugar.
El hecho ocurrió el jueves a las 11:10 de la mañana en las cercanías del ejido Estación Noé, municipio de Gómez Palacio, Durango, según el reporte de alerta que ingresó al sistema de emergencia 911.
Vecinos de la comunidad rural y de otras cercanas llegaron al lugar al notar la presencia de elementos de las distintas corporaciones policíacas, de rescate y ver que el convoy ferroviario había detenido la marcha.
En el lugar fue identificado por familiares que no daban crédito a lo sucedido, como Ricardo Hernández Martínez, del que indicaron vivía en la misma comunidad donde ocurrió la tragedia.
Paramédicos de Cruz Roja que acudieron al llamado de auxilio, revisaron al afectado que yacía sobre el suelo, confirmando con ello que ya no contaba con signos de vida apreciando a simple vista graves contusiones en cráneo y diferentes partes del cuerpo.
Elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal y Protección Ciudadana, Policía Estatal e Investigadora de Delitos, delimitaron el sector donde quedó el cuerpo del afectado, a solo unos metros de las vías del ferrocarril y entre matorrales, haciéndose cargo del reporte personal de Guardia Nacional División de Caminos.
El Agente Investigador del Ministerio Público y Peritos del departamento de Servicios Periciales, realizaron la diligencia correspondiente para levantamiento del cuerpo y traslado al anfiteatro para la necropsia de rigor y determinar causa de muerte.
Juan Pablo, de 55 años de edad, conductor del convoy proveniente del estado de Chihuahua y con dirección a Torreón, Coahuila, indicó a las autoridades que a una distancia considerable se percató que la persona se encontraba sentada en las vías, por lo que activó el silbato e intentó detener la marcha, sin lograrlo por la velocidad con que se desplazaba, impactando así al afectado.
EGO