Personal de seguridad de la Plaza 500, ubicada en Uruapan, Michoacán, tiró las donas y pan de un adulto mayor que las estaba vendiendo en la calle.
El momento fue captado en video y se viralizó. En la grabación se observa cuando dos guardias se acercaron al sitio donde estaba el pan dulce.
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"Se van a meter en problemas", dijeron testigos al confrontar a los guardias
Uno de ellos sostuvo una bolsa negra, mientras el otro retiraba los productos. En ese momento, el hombre no estaba cerca del lugar, pero testigos confrontaron al personal y acusaron que estaban cometiendo abuso de autoridad.
"Se van a meter en problemas, (...) no saben en la que se acaban de meter, van a ir a parar al 'bote' porque están en propiedad privada. (...) Aquí los señores llevándose las donas, se las acaban de quitar al señor y las tiraron", dijo una persona frente a los guardias.
El personal, que iba vestido con una camiseta tipo polo gris con la leyenda "seguridad privada", se limitó a responder que estaba siguiendo instrucciones del gerente.
Guardia amagó al adulto mayor con su porra
Poco después llegó el adulto mayor y comenzó a exigir una explicación por el pan que habían tirado. "En qué quedamos", se le escuchó decir.
Uno de los elementos de seguridad retrocedió y sujetó la porra que tenía en un costado para amagar al hombre. En tanto, el afectado y los testigos elevaron el tono de sus reclamos.
Así fue denunciado el abuso de autoridad en la Plaza 500 | VIDEO
El hombre persiguió a los guardias por el estacionamiento. Algunos de los testigos los siguieron, pues presumían que los guardias podrían golpear al adulto mayor.
Afectado recibió indemnización de 10 mil pesos
En una segunda grabación se observa cuando la víctima y un testigo hablaron con al menos tres policías.
Un tercer video muestra al hombre en lo que parece ser una oficina de la Plaza 500. El adulto mayor estaba sentado frente a una supuesta administradora.
La mujer dijo: "espero que también esto lo suban a redes sociales, le hicieron un daño impresionante al centro comercial" y después comenzó a contar el dinero que sería entregado al afectado.
Una vez que contó hasta diez, pues sumó la cantidad de mil en mil, la trabajadora negó dar su nombre para la grabación y tampoco dio la mano al adulto mayor cuando éste se retiró. Usuarios en redes sociales señalaron que la mujer humilló y trató con desdén al afectado.
ROA