Cuatro duranguenses que se encontraban en Israel desde el fin de semana que comenzaron los ataques armados entre el Estado de Israel y la organización Hamás, ya se encuentran a salvo en la ciudad de Taba, en Egipto, al salir vía terrestre.
Francisco Hernández, habitante de Guadalupe Victoria, quien viajaba con su madre, dijo vía Zoom que hubo momentos complicados cuando comenzó el conflicto. Ellos dos se encontraban acompañados de una amiga y su madre, oriundas de Santa María del Oro.
“Han sido momentos muy difíciles, momentos de estrés. De Durango somos 4 personas, dos de Guadalupe Victoria y dos se Santa María del Oro, una amiga y su mamá también, iba a ser un regalo a nuestras mamás un viaje a Tierra Santa, y viajamos con una empresa que se dedica a realizar este tipo de tour”.
Explicó que intentaron comunicarse con la Secretaría de Relaciones Exteriores, pero no hubo respuesta, y fue por eso que las empresas de turismo les ofreció el salir vía terrestre.
“Nos pusimos en contacto con la Secretaría de Relaciones Exteriores, mandando los documentos. Lamentablemente, de las peticiones no obtuvimos algún correo certero. Y sí, se nos complicaba mucho el traslado a Tel Aviv, porque la situación está muy difícil. Nosotros nos quedamos en Israel, cuando comenzó el tour llegamos el aeropuerto de Tel Aviv, posteriormente ya nos trasladamos a lugares históricos y en Jerusalén fue donde ya no nos pudimos mover por cuestiones de la situación que está pasando”.
Uno de los momentos más complicados, según las versiones Hernández en el momento que fue abordado por soldados y su pasaporte se encontraba en otra mochila que no era la que traía, pero salió avante.
“Hubo una situación que sí me angustió muchísimo, estábamos en Jerusalén, y quisimos ir al Belén, que logramos ir a la iglesia de la Trinidad. Y de regreso, ya nos pidieron la documentación, y lamentablemente que me quedó el pasaporte es mi otra mochila, y se dio un momento muy drástico y de miedo, porque los soldados, las gente que está vigilando las entradas me empezaron a pedir más información, que de dónde era, y tuve que sacar los documentos oficiales, la credencial y la licencia de conducir".
"Tenía el pasaporte digital, ya lo muestro, y ya con la ayuda de personas que se comenzaron a acercar, del ejército supongo se tranquilizaron y me dejaron pasar”.
EGO