El Ejército y el gobierno de Guerrero llevaron a cabo la destrucción de 404 armas de fuego, decomisadas en diferentes operativos a presuntos integrantes del crimen organizado.
Entre las armas destruidas se encuentran tres Barret calibre 50, de las que se indican, alcanzan aeronaves y penetran blindaje de alta gama.
Julio Cesar Pesina, comandante de la 35 Zona Militar, explicó que el armamento decomisado se destruye para evitar que pueda ser utilizado nuevamente en la comisión de delitos.
En la explanada del 50 batallón de infantería se inhabilitaron 222 armas largas y 182 cortas.
"Cada arma destruida es un paso que se avanza hacia la pacificación del estado", dijo la gobernadora Evelyn Salgado al momento de dirigir un mensaje.
"Cada bala, cada arma destruida va acompañada de programas de beneficio a las juventudes", aseguró, para explicar que no se tratan de acciones aisladas.
El problema de la inseguridad, de acuerdo con la gobernadora, se atiende de raíz, para sentar las bases de una solución de largo aliento al problema que se tiene.
ledz