Un nuevo campo de exterminio fue localizado en una zona ejidal a las afueras del municipio de Reynosa por integrantes del colectivo “Amor por los Desaparecidos”.
Edith González Treviño quien lidera el colectivo, comentó que el sitio se ubicó el miércoles, pero este jueves llegaron las autoridades para hacer el procesamiento del lugar que era utilizado para asesinar y calcinar a personas.
“Nosotros le decimos campo de exterminio porque al final de cuentas, es un campo en el cual acaban con la vida humana, es como se les denomina, cocinas clandestinas”, explicó.
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El lugar se ubica en un rancho abandonado, en la carretera Ribereña, a espaldas del antiguo centro recreativo Doña Lita, muy cerca del canal Guillermo Rodhe, a las afueras de Reynosa.
De acuerdo con la buscadora, todo parece indicar que se trata de una cocina “activa”, pues se localizaron restos humanos calcinados, “todavía se puede distinguir algo de tejido y piel en estas osamentas calcinadas”.
El lugar utilizado por criminales es una casa de un solo piso con techo de dos aguas.
Se trata de una casa grande, al frente se encuentran pintadas las siglas de un grupo criminal.
En los alrededores, por fuera del galerón con ventanas y puertas destruidas, se localizaron diversos artefactos, entre ellos algunos muebles quemados, pero también restos óseos calcinados. Al menos se localizó un cráneo y restos de huesos aún con piel, pero también calcinados, mismos que serán procesados por peritos para determinar a cuántas personas corresponden los residuos.
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En el segundo semestre del año los colectivos de búsqueda de personas desaparecidas, han localizado centros clandestinos de exterminio, principalmente en zonas ejidales del municipio de Reynosa, aunque también se han reportado en las inmediaciones de la macha urbana de la ciudad fronteriza de Tamaulipas.
Hace exactamente un mes en la brecha El Becerro, también en la ciudad de Reynosa, el colectivo “Amor por los Desaparecidos” encontraron una “cocina clandestina”, en donde los primeros indicios fueron restos humanos calcinados.
El descubrimiento de los sitios usados por el crimen organizado para desaparecer a posibles integrantes de grupos rivales se lleva a cabo principalmente a través de llamadas anónimas.
En el más reciente hallazgo aún no se establece el número de cuerpos ni su identidad, por lo que las pesquisas siguen.
SJHN