Kevin es hermano de Heidi, la niña que murió por una bala perdida en Nuevo Laredo. Él también resultó herido por las armas de fuego y además tiene un daño emocional tras ver morir a la pequeña el pasado 31 de agosto cuando viajaban en la camioneta de su mamá.
De acuerdo con el abogado de la familia, Édgar Netro Acuña, la mamá de Heidi llevaba a la niña al doctor pues se quejaba de un dolor de estómago, pero todo cambió en un momento.
Griselda Pérez Rodríguez circulaba por la Avenida Dr. Mier y al llegar a la esquina de la 20 de Noviembre se encontraban camionetas con leyenda de la Sedena cerrando la calle, la señora se dio la vuelta y a 30-50 metros escuchó detonaciones, pero siguió avanzando y fue su hijo quien le avisó que su hermana Heidi estaba herida.
“El niño Kevin, hermanito de Heidi, le dice ‘mi hermana está herida’, vio sangre, se asustó el niño, la señora se detiene, ve a la niña, la recuesta y se va a toda velocidad”, dijo el abogado en entrevista para Azucena Uresti.
Heidi perdió la vida de un disparo, pero su hermano Kevin también resultó herido también física como emocionalmente.
“Ya ha sido evaluado por médicos, al parecer trae esquirlas en la mejilla, le han estado haciendo radiografías, para ver si también en la cabeza tiene algún daño, el niño no ha querido comer, ha batallado para dormir, tiene un estrés postraumático a raíz de estos fatales eventos, a su corta edad ver fallecer a su hermana es impactante”.
Dijo que por el momento las autoridades no se han acercado con la familia para brindarles apoyo en los gastos médicos, ni protección tras los hechos ocurridos en Nuevo Laredo.
EAS