Seis marinos preparan mil raciones de comida para los damnificados por el huracán Otis. Sus manos permiten que las personas que lo perdieron todo puedan llevar algo de comer a sus hogares.
"20 kilos de arroz, 20 de frijol y de carne son 50 o 60 kilos de carne, más el insumo de jitomate, cebolla, chile. ¿Cuántas personas participan? En total son seis", comentó Constantino Ramón Robles, Cabo de la Secretaria de Marina Armada de México.
El menú de hoy: carne con cebolla, jitomate, arroz blanco y frijoles. Para muchos afectados de Acapulco si no fuera por estas cocinas comunitarias de la Secretaría de Marina, no por varían alimento en todo el día.
Marisela llevará de comer a cuatro compañeros de trabajo que no pudieron ir por estar reparando el negocio donde laboraban para comenzar a trabajar nuevamente.
"Es algo sagrado porque uno perdió todo, y estamos aquí porque necesitamos; yo trabajo y vengo de trabajar, yo vivo para la vocacional y tengo hambre, por eso vine a pedir", dijo Marisela Martínez.
Pese al negro panorama que aún se ve en las calles destruidas del puerto, la gente es positiva: "seguimos adelante aquí con la Marina que están en acción, riquísima la comida. Ahorita vamos a comer arroz con guisado de res, y en la mañana hay atún, arroz y frijoles", exclamó Guillermina.
Mientras el sol cae a plomo en Acapulco, el calor se deja sentir con toda su fuerza, la Semar instaló una planta móvil potabilizadora de agua qué dota de tres garrafones por persona por día de forma gratuita.
"La capacidad de esta planta es de mil 100 litros por hora. Hemos repartido entre 32 mil a 35 mil litros de agua. Nos instalamos el día 25 y somos diez personas", agregó Otilio Miranda Chávez, Marino