De nueva cuenta los jornaleros de Altamira están de luto, pues el joven que arrollaron el domingo, se dedicaba a la pizca de sorgo, y desde Tantoyuca había llegado con sus dos hermanos, menores de edad, para ganar dinero y ayudar a su familia.
El terrible accidente ocurrió el sábado pasado, sobre la carretera Tampico-Mante, a la altura del ejido Miradores, que fue arrollado a la vista de sus hermanos, por un vehículo que además no se detuvo para hacerse responsable.
El joven fue identificado como Santos Antonio “R”, de 25 años, que andaba con sus hermanos de 15 y 17 años, pues iban a comprar comida a una tienda que está cerca del sitio del accidente.
El muchacho y sus hermanos eran originarios de Tantoyuca, ellos están trabajando en la recolección de sorgo, en el ejido Río Tamiahua, pues es temporada de corte, los tres desde muy chicos se dedican a la pizca, el objetivo era llevar más dinero a su familia.
Santos Antonio y sus dos hermanos llevaban en Altamira apenas cuatro días, sin pensar que cruzar esa peligrosa carretera iba a resultar mortal, pues cabe señalar que la zona está muy oscura.
La delegada del ejido Río Tamiahua, de nombre Yesenia, fue la encargada de dar datos a las autoridades, pues justo por ser un joven que llevaba a trabajar a sus dos hermanos menores, los residentes del lugar los identificaron rápido y les ayudaban en lo que podían.
Sin embargo, todo parece indicar que este caso va a quedar impune, pues las autoridades revelaron que cerca de la zona no pudieron identificar cámaras de vigilancia que pudieran grabar las características de la unidad responsable.
AYPC