Las lluvias registradas en los últimos meses en la región lagunera y la mala compactación en los trabajos de pavimentación en las principales calles del ejido Rancho Alegre en Torreón, provocó que se registrara un socavón de más de 200 metros de largo y dos metros de profundidad.
Los vecinos señalan que desde el pasado mes de septiembre se registró el hundimiento, sin que a la fecha autoridades hayan acudido para solucionarlo.
Esta situación pone en riesgo a quienes pasan por el lugar, ya que no existen señalamientos en donde se alerte sobre el pozo y por las noches resulta más peligroso.
Manifiestan que el domingo por la noche, un camión de personal cayó en la zanja, por lo que tuvieron que acudir paramédicos de la Cruz Roja para brindar atención al conductor.
“Está oscuro y luego el chofer no sabía, pasan ahí y no saben porque no han ningún señalamiento ni nada”.
Comentan que inicialmente un empresario realizó trabajos de introducción de tubería, la cual está interconectada con una de las plantas tratadoras que se encuentran cerca del ejido.
“Un señor que metió tubería para sacarla para un establo, para regar unas parcelas, todo esto tiene tubo y desbarató toda la colonia”.
Aseguran que después de que realizó los trabajos se arregló la calle, sin embargo no compactaron adecuadamente, por lo que con las lluvias se registró el socavón que va creciendo a lo largo de la calle.
“La compactación fue lo que quedó mal, y aquí es muy arenoso y hasta la barda desbarataron”.
Comentan que ya algunas de las viviendas cercanas han presentado algunas cuarteaduras y asentamientos.
Hasta el momento, señalan que las autoridades no han acudido, por lo que hicieron el llamado para que atiendan la problemática.