El gobernador de Durango, José Rosas Aispuro Torres, sostuvo que las lluvias que se han registrado no favorecen a la agricultura, pues el agua a caído en la Zona Metropolitana y no en la cuenca alta del Nazas.
El mandatario sostuvo que en este momento la presa Lázaro Cárdenas tiene un almacenamiento del 40 al 50 por ciento de almacenamiento, mientras que la Francisco Zarco sólo tiene un 56 por ciento, por lo que estas lluvias que caen en la zona urbana de poco o nada le sirven para garantizar un plan de riego suficiente para el 2020.
“Estas lluvias como son hacia la parte de los valles y no es hacia la parte de la sierra los escurrimientos en la cuenca alta van a ser mínimos , por lo que la esperanza que tenemos es que llegue algún ciclón al Pacífico porque cuando llegan por este lado son los que más pegan en la sierra y es el agua que baja a la cuenca de La Laguna”, dijo.
Sostuvo que el problema en corto plazo que tienen es grave porque si no se tiene agua suficiente en las presas se pone en riesgo los ciclos agrícolas 2020 y 2021, "de ahí que aspiramos a que siga lloviendo en septiembre y con ello tener la posibilidad de tener garantizado el ciclo agrícola".
Hizo ver que la temporada de lluvias se acaba el primero de octubre y con ello se hace un “corte de caja” para ver con que se cuenta para poder dar cumplimiento al ciclo agrícola 2020, será el 30 de septiembre cuando se conozca la disposición de agua en las presas regionales de La Laguna y con ello planear el siguiente plan de riegos.