El músico Jesús Carrillo Gámez, asegura que tocando el acordeón ha podido mantener a su familia, interpretando música colombiana por las calles de la Comarca Lagunera.
"El acordeón es el que sostiene a mi familia", dijo.
Lo acompañan su amigo Antonio, que toca la tarola y su Papá, Juan Francisco moviendo las maracas.
Los tres caminan a diario entre 8 y 10 kilómetros y se desplazaban sobre la avenidas de Torreón, Matamoros, Francisco I Madero y San Pedro.
Estos llevan la cumbia a los bares, plazas públicas, casas particulares y otros lugares en los que son contratados.
"Hemos salido a Puerto Vallarta, incluso ahí nos contacto una persona, quien está decidida a promovernos en esa zona costera", añadió.
Dijo que también han estado en la Feria de San Marcos, en Aguascalientes, donde fueron recibidos con agrado y sobre todo que aceptaron la música.
Enfatizó que en algunos lugares, donde llegan a tocar, la gente hace la fiesta y se pone a bailar, por lo que les dan a entender que van avanzando en el gusto y agrado.
Detalló que han vivido experiencias buenas y malas, como aquellas en que algunos los corren del lugares e incluso hasta los han insultado.
Por su parte, Juan Francisco, confía en que esta pequeña agrupación, logré posesionarse de manera profesional, ya que el ritmo colombiano es muy gustado en La Laguna.
Comentó que su hijo que su hijo, desde muy pequeño tocó el acordeón y a través del tiempo fue mejorando, sin la necesidad de acudir a una escuela de música.