El perro sigue como el preferido de los domésticos e incluso, muchos de ellos se llegan a considerar como parte de la familia, pero, ¿en verdad sabemos cuáles enfermedades pueden llegar a presentar a lo largo de su ‘corta’ vida?
En el marco del día mundial del Perro, el presidente de la Asociación de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies en la Laguna, Juan Carlos Lugo García, comparte que entre las enfermedades más comunes en los canes vacunados están las relacionadas con problemas gastrointestinales.
Resaltó que esto proviene de una mala alimentación fomentada en primera instancia por los dueños, mismos que asegura, suelen alimentar a su mascota como si fueran humanos con comida no apta para ellos.
“Enfermedades gastrointestinales son comunes principalmente por mala alimentación y mala nutrición, lo cual viene de una la mala información y falta de cultura de la gente de quererlos alimentar como humanos”, dijo.
La situación es peor con los que no han sido vacunados o de la calle, ya que las principales enfermedades que presentan están relacionadas con moquillo, erliquiosis (por picaduras de garrapata), leptospirosis (bacteria que afecta el sistema digestivo).
Entre las enfermedades caninas más mortales en la región lagunera está la giardiasis, que se manifiesta con diarrea, dolor abdominal y adelgazamiento del perro por falta de apetito, el parvovirus, que presenta fiebre, vómito y diarrea con sangre abundante, así como el moquillo, que afecta el sistema nervioso, digestivo y al sistema nervioso.
El especialista en especies pequeñas recordó que ninguna vacuna evitará al cien por ciento la patología por la cual se aplica, sin embargo ayuda a disminuir las probabilidades y las enfermedades que comúnmente presenta son diferentes en gravedad, por lo cual se recomienda que los ‘lomitos’ (como se les conoce coloquialmente), cuenten con su cartilla de vacunación.
Respecto a los costos que representa atender a la mascota en dado caso que presente una enfermedad de las mencionadas, el veterinario Lugo García señala que será menor el costo conforme se atienda más rápido al animal, con cirugías que van de los 800 los 15 mil pesos.
“La enfermedad que resulta más costosa es la que no se atiende a tiempo porque cuando se quiere atender ya es muy difícil utilizar todas las herramientas que el médico tiene para salvarlo como instalación de placas en fracturas, transfusiones sanguíneas o cirugías, que llegan a costar hasta 15 mil pesos”.