Después de sufrir un infarto, Carlos Rodríguez, artista urbano que todos los días lanza al viento y con la voz de un niño algunas palabras de cariño y esperanza a los peatones a través de su muñeco ‘Pancholin’, retomó su espectáculo e incluso ahora vende números para una rifa de dos títeres con el propósito de reunir fondos para la convalecencia de una cirugía programada y también para algunos costales de croquetas para sus 13 perros.
Fue en una entrevista realizada en agosto del año anterior que el artista reportó problemas de salud; la gangrena le afectó uno de los pies y tenía dificultades visuales al padecer de cataratas, sin embargo fue el infarto el que lo colocó en una situación crítica que ahora deberá atender con medicamentos y reposo.
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“Aunque me dijeran que no puedo trabajar debo hacerlo, la necesidad me mueve y hay que echarle ganas, todavía ando débil pero depende de mí mi esposa y mis animalitos, mis perritos, un día sin trabajar para nosotros no es pensable, ¿qué hacen ellos? Soy de las personas que piensa que hasta que dios me recoja seguiré luchando. Mientras yo viva, no los dejo”.
Carlos o Pancholin, como cariñosamente le dicen los amigos, continúa así arreglándose para su espectáculo y casi todos los días sale pulcramente vestido con su maletín en mano, trasladándose en autobús desde el fraccionamiento Quintas Los Nogales hacia el centro histórico de la ciudad.
“Yo pienso que si hacemos el bien a los seres humanos, dios tiene misericordia de nosotros, y si hacemos algo bien, dios nos da la oportunidad de sacarnos. Mis vecinos se quejan que porque ladran, pero si los tenemos limpios, lo que hagan nuestros perros es lo de menos. Ahora está tranquilo el centro pero como quiera dios nos está bendiciendo, es grande y no nos deja. Estuve juntando porque me van a operar del corazón”.
Carlos Rodríguez agradeció a MILENIO porque luego de una nota publicada recientemente la gente comenzó a apoyarlo, sin embargo, ahora debe vender sus instrumentos de trabajo, es decir, algunos muñecos de ventriloquía, hecho que al pronunciarlo le quiebra la voz.
“La gente ha sido solidaria pero de hecho estoy rifando un muñeco para completar. Voy a rifar otro para poder completar lo que viene siendo esto. El que rifo juega este domingo y otro juega si dios quiere la otra semana. Muchos me critican y me dicen que si estoy malo para qué me preocupo de mis perros pero voy a luchar por ellos porque la gente es dura”.
El artista dijo que debe comprar dos bultos de croquetas por semana y ahora deberá ahorrar no para la cirugía que está cubierta sino para su convalecencia.
“Gracias a mi padre Dios lo de la cirugía ya se completó, ahora lo que me falta es para tener algo ahí guardadito para mis perritos. Yo sé bien que por ejemplo ahorita yo me siento débil, me la pasé toda la semana malo, pero tuve que venir hoy porque pensé en recuperar lo de la rifa… está uno al día. Las cosas no están fáciles y la pandemia vino a comernos a todos”.
El teléfono de Carlos Rodríguez, Pancholin, es 871 451 9436. Los interesados en apoyarlo también pueden hacer algún depósito a la cuenta de Oxxo 4766 8414 3282 8997.
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