Suspenden visitas a penales de Michoacán por Covid-19; reos protestan

Reos del penal de Morelia protestaron para exigir que no se suspendan las visitas conyugales, una de las medidas que tomaron autoridades para evitar contagios de coronavirus.

Los reos protestaron ante la suspensión de visitas conyugales. (Jocelyn Estrada)
Jocelyn Estrada
Michoacán /

El Sistema Penitenciario de Michoacán implementó medidas preventivas para evitar contagios de coronavirus en cárceles del estado, entre las que se encuentra la suspensión temporal de visitas, lo que generó que un grupo de reos del penal de Morelia se manifestaran.

Al espectro, el coordinador del Sistema Penitenciario, Javier Ayala Rodríguez confirmó que desde el pasado lunes 16 de marzo se suspendieron las visitas familiares a las personas privadas de la libertad de los 11 centros de reclusión del estado.

“Los centros penitenciarios iniciaron y ejecutaron puntualmente el protocolo de prevención y detección de Covid-19, y además se están impartiendo capacitaciones al personal administrativo, operativo y platicas de promoción y prevención en salud sobre el tema”, señaló el funcionario estatal.

Entre las medidas preventivas implementadas se encuentra la colocación de un protocolo de sanitización e higiene a la entrada de cada uno de los centros. Además, se restringe el ingreso de personas con cualquier sintomatología respiratoria o que hayan estado en contacto con casos sospechosos o confirmados de la enfermedad.

Asimismo, se designó un área de cuarentena para las personas privadas de la libertad que tienen que acudir a hospitales por citas medidas o emergencias, para garantizar las condiciones de sanidad para toda población de los centros.

Tras el anuncio de las medidas, un grupo de reos del penal David Franco Rodríguez, ubicada en Morelia, protestaron para exigir que se reanuden las visitas de familiares.

Alrededor de 100 reos se apostaron en el exterior de las oficinas administrativas de la prisión, a fin de exigir que no se cancelen las visitas conyugales.

Tras la protesta, cerca de 400 policías estatales llegaron al lugar, pero no hicieron uso de la fuerza pues las autoridades del centro de reclusión instalaron una mesa de diálogo con los inconformes, en la que explicaron a los internos que la medida es para evitar los contagios de Covid-19.

RLO

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