La captura del líder del grupo delictivo "Los Rojos", Santiago Mazari Miranda, El Carrete, puede desatar un incremento de la violencia en el estado de Morelos, reconoció el secretario de Gobierno, Pablo Ojeda Cárdenas.
En entrevista, el funcionario estatal apuntó que las autoridades estatales están en alerta ante la posibilidad de que la captura de Mazari, la detención de su principal operador en Guerrero, Marco "N" y la caída de su segundo al mando en Morelos, Juan Martínez, El Teniente, traiga más violencia y muertes, principalmente en el sur de la entidad.
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"Va haber una recomposición de fuerzas en este grupo y debemos estar atentos", subrayó.
Según Ojeda Cárdenas estos hechos generan las condiciones propicias para un reacomodo en el grupo delictivo de Los Rojos o para intentos de avance de sus rivales, como sucedió en la zona oriente tras la captura de El Ray, quien junto con El Carrete, son los dos sujetos que mayor terror estaban causando en Morelos.
Apuntó que el escenario obliga a las autoridades a ordenar despliegues y operativos en diversas partes del estado, principalmente en la zona sur, a donde solicitará el apoyo de fuerzas federales.
"Nosotros no permitimos ningún tipo de negociación ni de comunicación con grupos criminales", añadió.
Abundó en qué Morelos tenía considerados - al menos ocho objetivos criminales de primera intensión, por lo que la detención de Mazari y Marco "N" reduce a seis dicha lista.
jos