Habitantes de la ranchería El Capulín en el municipio de Donato Guerra, Estado de México, demandaron a las autoridades de medio ambiente reabrir el santuario de la mariposa monarca, ya que aseguran, sin la actividad turística se ha incrementado la tala clandestina en la zona.
El próximo 27 de noviembre, los santuarios ubicados en territorio mexiquense, La Mesa del municipio de San José del Rincón y Piedra Herrada en Temascaltepec, reabrirán al turismo tras permanecer cerrados por la pandemia de covid-19, pero los santuarios del Capulín y Macheros, en Donato Guerra permanecerán cerrados, según anunció la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
Al respecto, habitantes del Capulín, acusaron que el presidente del comisariado ejidal tomó la decisión de mantener cerrado el santuario de manera unilateral, sin consultar a la asamblea que se tendría que tomar la decisión, ya que nuevamente se quedarán sin recursos quienes dependen de las actividades turísticas, y por el contrario, se beneficia a quienes llevan a cabo actividades ilícitas de tala.
Acusaron que el paraje Lagunita, ubicado en Cerro Pelón se encuentra sumamente deteriorado por la tala de al menos 100 árboles; el sitio guarda un importante valor ya que fue la primera colonia de mariposas monarca descubierta, por lo que fue fotografiado en 1975 por la revista National Geographic.
Las autoridades ambientales reconocen que el paraje Lagunita está degradado, pero sostienen que se está poniendo más atención al sitio que pertenece al ejido Nicolás Romero, dentro de la zona núcleo de la reserva, por medio de un programa de mejores prácticas entre el ejido y la comunidad indígena.
La Conanp aplica en la comunidad programas de subsidios del Programa para la Protección y Restauración de Ecosistemas y Especies Prioritarias, implementando acciones de restauración ecológica, vigilancia y monitoreo comunitario, por lo que el área está en proceso de restauración por establecimiento de árboles de oyamel.
LG