En mayo pasado, cuando llegaron los servidores de la Nación a la colonia Morelos a realizar el censo de pescadores que recibirían apoyos por el covid-19, se hizo una corredera: para muchos, era la única forma de garantizarse un ingreso en medio de la crisis.
La fila fue larga
Y, dicen los habitantes de la zona, se formaron lo mismo pescadores que aquellos que nada tienen que ver con el mar. Como el censo se hizo sin controles, terminaron recibiendo el subsidio casi todos en la colonia.
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Casi todos, excepto ellas: para su mala fortuna, medio millar de mujeres fueron ignoradas en el censo. Esta es la historia de las despicadoras del sur de Tamaulipas y el norte de Veracruz, mujeres que, gracias a la agilidad de sus manos, pelan cientos de camarones por minuto
Entre la veda y la falta de apoyos, las despicadoras se han quedado sin recursos: algunas de ellas sostienen a sus familias, están obligadas a llevar el alimento a sus hogares y tienen que vender mangos afuera de sus casas o pedir trabajo como empleadas domésticas.
Anabel Deantes García es habitante de la colonia Morelos, despica camarón desde los 15 años y hoy acumula más de 30 años de experiencia; ha pelado cientos de miles de camarones en ese lapso. Esa es la forma que ha elegido para ayudar a su esposo en sostener la casa y llevarle la comida a su hijo de 11 años.
Tiene su certificado de salud avalado por la autoridad estatal y “por un error” de los Servidores de la Nación, que hace más de un mes acudieron a realizar un censo a la colonia Morelos, se quedó sin 7 mil 200 pesos de apoyo federal enfocado a despicadoras y pescadores.
“Me dejaron fuera del apoyo, a mí no me censaron ni nada y ando viendo a dónde ir a que me den el apoyo”, contó a MILENIO. Para colmo, recuerda que la veda de camarón concluye hasta el próximo 15 de agosto. O sea, no va a recibir ni un peso por su oficio, cuando menos, hasta principios de septiembre.
Pero como la crisis económica detonada por el covid-19 aprieta más que nunca y no es tan fácil llevar el dinero a casa, Anabel ha decidido buscar ingresos limpiando casas ajenas a pesar del riesgo que eso conlleva en esta etapa de pandemia.
“Me arriesgo al andar en casas haciendo el quehacer, pero quiero sacar adelante a mi hijo, porque se avecina el gasto de la escuela, los uniformes, la inscripción y todo eso”, comenta la mujer tampiqueña.
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Martina Ramírez de la Fuente es otra mujer dedicada a despicar camarón desde hace más de tres décadas y también se quedó fuera de los apoyos federales, los pocos actualmente que contemplan dinero.
Martina asegura tener estudios médicos, documentos que demuestran a qué se dedica; sin embargo, eso no ha sido suficiente para la autoridad federal porque “no fui contemplada para ese beneficio, pero personas que no tienen nada que ver con esto, ni siquiera son pescadores, sí lo recibieron”.
Es madre soltera y con las reglas de distanciamiento social en este momento es complejo ponerse creativos con el fin de conseguir recursos, así que una opción es poner un pequeño negocio afuera de su casa en el que “vendo mangos y papaya, son frutas de temporada y es la forma en la que podemos sacar unos pesos”.
“Tengo que llevar la comida a mi casa para alimentar a mis tres hijos, soy madre soltera y soy despicadora desde hace más de 30 años, por eso voy a intentar recuperar ese beneficio social”, puntualizó.
Los apoyos federales comenzaron a fluir desde la semana pasada en la zona sur de Tamaulipas y hasta este momento los pescadores continúan con los cobros, inclusive, realizan largas filas en la oficina de Telégrafos. Es el único dinero que fluye en la región.
“Vinieron a hacer el censo a la colonia pero dejaron que se anotaran las personas que dijeron trabajar en esto de la pesca, sin poderlo comprobar, lo cual causó que las trabajadoras de una planta completa no fueran tomadas en cuenta”, detalló.
Amenazan con bloqueo
Por la desesperación, las despicadoras de la colonia Morelos amenazaron con bloquear el Puente Tampico si la coordinación de los programas federales no les entrega los apoyos.
Aureliana Núñez exigió a las autoridades federales resolver el problema, de lo contrario van a bloquear calles y avenidas, incluso el Puente Tampico.
Pero... ya se cerró la ventanilla
Las autoridades federales en el sur de Tamaulipas aseguran que la lista beneficiarios de dichos apoyos se cerró y no hay cabida para poder ingresar a más personas.
Elizabeth Cruz Hernández, responsable de la coordinación de los programas de la federación en Tampico, Ciudad Madero y Altamira, indicó “ya está cerrada la ventanilla de este programa, solamente esperamos a algunos pescadores que se encuentran en altamar”.
Cruz Hernández detalló que “son 40 aproximadamente los pescadores que se encuentran en labores de pesca, quienes están por regresar a la zona sur del estado, ya que es temporada de veda”.
Los únicos beneficios otorgados hasta el momento a este sector tampiqueño han sido despensas a cargo de la Secretaría de Bienestar de Tampico, las cuales se les entregan periódicamente.
Asimismo, los empresarios armadores han contribuido con algunos beneficios al sector, hoy en día uno de los más vulnerables debido al coronavirus.
ledz