A cinco años de los sismos de 2017, la falta de voluntad política, los problemas económicos, la carencia de recursos públicos y la eliminación del Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales (Fonden), son factores que influyen en que falten por reconstruir más de 23 por ciento de los inmuebles históricos en Puebla que resultados dañados.
De acuerdo con el análisis “La alerta sísmica y el monitoreo del comportamiento del suelo, fundamentales para prevenir a la gente”, realizado por Eduardo Ismael Hernández y Gerardo López Arciga, investigadores de la Facultad de Ingeniería Civil de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep), el primer paso para completar la reconstrucción de los inmuebles dañados por los sismos se centra en la voluntad política.
El del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) reporta que, en el estado de Puebla, el monto total de recursos aplicado en la reconstrucción de los inmuebles históricos afectados por los sismos de 2017 asciende a 860 millones 878 mil 864.53 pesos.
De los 621 inmuebles históricos religiosos o propiedad federal con afectaciones de diversa magnitud, 414, es decir, 66.6 por ciento, ya fueron intervenidos en su totalidad. El informe muestra que 207 inmuebles considerados Monumentos Arqueológicos e Históricos y que corresponden al 33.3 por ciento del total de afectados por los sismos, ya están en proceso de intervención.
A cinco años del movimiento telúrico de magnitud de 7.1 de las 13:14 horas del 19 de septiembre de 2017, Eduardo Ismael Hernández resaltó la importancia de una coordinación entre autoridades e instituciones para impulsar acciones para concluir la reconstrucción de inmuebles.
“Si hasta la fecha no se han logrado rehabilitar los inmuebles es una falta de voluntad política y la otra es la falta de recursos. La falta de recursos que casi siempre lo manejan las autoridades. Yo creo que sí hay, solo que falta la voluntad política para hacer cumplir la ley. Las universidades, los institutos de investigación, los colegios de ingenieros civiles, de alguna forma, debemos capacitarnos para apoyar a las políticas públicas”, apuntó.
La eliminación del Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales (Fonden) por parte del gobierno federal es otro de los factores que complicó el proceso de reconstrucción porque cambiaron las reglas para continuar con los trabajos.
“El Fonden era un fondo que permitía contar con recursos extraordinarios. En ese contexto, siento que es una mala decisión el desaparecer el Fonden. Los recursos destinados para la prevención de desastres también desaparecieron. Fue una afectación importante”, añadió.
En su oportunidad, Gerardo López Arciga, investigadores de la Facultad de Ingeniería Civil de la Upaep, destacó que la falta de recursos en los gobiernos es un factor fundamental en los trabajos de reconstrucción.
“No hay recursos que alcancen. Lo que si se debe pedir es que la aplicación de recursos sean transparentes. Ante el daño de un sismo, se debe investigar la razón del daño y luego analizar la conveniencia de la reparación o de la rehabilitación”, añadió.
Por último, el investigador explicó que cuando un edificio se daña tras un sismo, se requieren realizar diferentes estudios para determinar las acciones a seguir, situación que retrasa los procesos de rehabilitación o reconstrucción, ante lo cual, resaltó la importancia de que se mantengan procesos de transparencia en la aplicación de recursos durante el tiempo en que se desarrollan los trabajos de atención de inmuebles.
“Cuando una estructura se daña, no solo son las grietas. Como anteriormente se comentaba, las estructuras que presentan un temblor. Esto requiere de un estudio complejo y se requieren recursos. Los estudios no se pueden realizar de un día para otro”, finalizó.
AFM