Más de 50 mil alojamientos en Quintana Roo que se ofrecen mediante plataformas digitales, como Airbnb, tendrán que pagar un impuesto al hospedaje del seis por ciento. El gravamen entró en vigor tras su publicación en el Diario Oficial del Estado.
Así, todas las personas, sean físicas o morales, que brindan hospedaje mediante esta modalidad tendrán que realizar el pago al servicio tributario de la entidad.
De acuerdo con la publicación, las plataformas digitales deben enterar al Servicio de Administración Tributaria de Quintana Roo (SATQ) un padrón de anfitriones que rentan un espacio.
El secretario de Turismo del estado, Bernardo Cueto, informó que este acuerdo se dio en mesas de diálogo "para regular esta actividad comercial dentro del ámbito turístico y poder tener un ordenamiento", dijo en entrevista para MILENIO.
Consideró que "es importante que las personas se registren y que los turistas puedan tener certeza que su alojamiento está dentro del marco legal".
Los llamados anfitriones ahora tendrán que contar con una licencia de funcionamiento para seguir operando y cumplir con las obligaciones fiscales ante las autoridades.
De esta manera se pretende que todas las personas que brindan hospedaje cumplan con su obligación tributaria. Las autoridades indicaron que el registro podrá hacerse en línea.
ROA