Desde 1969 hasta este miércoles 28 de agosto se han registrado por lo menos 47 incidentes en la refinería Francisco I. Madero, desde los más simples donde no se registraron lesionados ni personas fallecidas, hasta los más trágicos.
Hoy nuevamente se registró otro incidente en este lugar con una fuga en la planta de azufre, qué dejó como saldo dos trabajadores intoxicados y la evacuación de decenas de empleados más hacia el punto de reunión en Avenida Álvaro Obregón.
Los afectados tuvieron que ser trasladados de urgencia en dos ambulancias de Pemex que salieron por la puerta uno y con sirena abierta hacia el Hospital Regional ubicado en calle 10, donde pasaron un proceso de descontaminación y posteriormente pasaron a la atención médica.
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Lo anterior fue confirmado por fuentes oficiales del interior de la refinería quienes aseguraron que todo fue controlado en poco tiempo y así se pudo evitar que esto acabara en una tragedia.
Van 47 incidentes en refinería Madero
En una recopilación realizada por Milenio sobre los hechos más trascendentes en este centro refinador de petróleos mexicanos ubicado en Ciudad Madero, se ha logrado constatar que el más mortífero fue la explosión de un tanque en noviembre de 1969, qué trajo consigo un gran número de víctimas mortales.
Del 2012 al 2013 la Subdelegación de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, así como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, le fincaron a Pemex, 37 investigaciones por accidentes u omisiones.
El 11 de abril del 2014, Profepa abrió un proceso por explosión en una caldera, el 5 de mayo por el incendio en la planta de coque, y el último fue el 17 de mayo del mismo año por la explosión e incendio en un tanque de almacenamiento de gasolina.
El 23 de julio del 2014, Petróleos Mexicanos reportó un incendio en el tanque de gasolina MJN-T-510. En agosto del mismo año, se presentó una nueva explosión en la planta coquizadora de la Refinería Francisco I. Madero que dejó como saldo dos trabajadores de Pemex fallecidos y once heridos.
El 15 de diciembre del 2017 un trabajador murió tras sufrir quemaduras de tercer grado en la Refinería. Durante los trabajos de arranque de la Planta de Alquilación, un empleado tuvo un accidente que le ocasionó las quemaduras severas que le arrebataron la vida.
A mediados del 2021, un par de trabajadores que estaban en un buque tanque, se cayeron de una escalera y presentaron algunas lesiones, aunque estás no fueron consideradas como graves.
En junio del 2022, Pemex presumió que la Terminal de Almacenamiento y Servicios Portuarios Madero (TASPM) de la refinería Francisco I. Madero cumplió 365 días sin tener algún tipo de accidente incapacitante.
En febrero 2024 se percibió un fuerte olor a gas por Ciudad Madero y Tampico, porque se apagó uno de los quemadores, repitiéndose esto, en diversas ocasiones hasta el mes de abril.
El último fue el pasado 27 de abril 2024, con una enorme fumarola en color amarillo, que a pesar de que provocó mareo y náuseas en ciudadanos, la empresa productiva del estado aseguró que no era tóxico.
Familias viven entre el miedo por incidentes
Los accidentes en el centro refinador Francisco I. Madero han venido a la baja, por lo menos, ya no son tan mortíferos como en años anteriores, sin embargo, han dejado una huella imborrable para quienes residen en las colonias de los alrededores.
Vivir junto a las instalaciones de Petróleos Mexicanos, los ha llevado a experimentar el miedo y la desesperación, en los incidentes más graves, obligándolos a abandonar su patrimonio por tiempo indefinido, anteponiendo primero sus vidas y las de sus seres queridos.
Esto también ha despertado en los residentes de las colonias Emilio Carranza, La Barra, Galeana y Miramar, la empatía con el prójimo, debido a que cada que ocurre una explosión o fuga de químicos, se ayudan entre sí, para salir del problema.
La profesora jubilada, Rosa María Ollervides, cuenta su historia y plática que ha tenido que atravesar por momentos difíciles. Uno de ellos, cuando explotó un tanque a escasos metros de su casa ubicada muy cerca de la barda de refinería por la calle Altamirano.
“Se escuchó un estruendo muy fuerte, toda la casa retumbó. Cuando salí a ver, el tanque estaba en llamas, no sabía si íbamos a salir con vida de esto”.
Agarraron solo los documentos importantes y salieron corriendo de su casa. Al tener dos vehículos, ella y su esposo optaron por llevarse uno cada quien, pues en experiencias anteriores, siempre veían a vecinos corriendo para salvar sus vidas.
La idea era ponerse a salvo en el punto de reunión que es playa Miramar de Ciudad Madero, pero a su paso, iban recogiendo a las personas que no tenían vehículo, para sacarlas de la zona de peligro lo más pronto posible. Está es solo una de las tantas historias que se pueden contar a los alrededores de la refinería.
SJHN