Ante la falta de hospedaje, no sólo en Acapulco sino en Chilpancingo, servidores de la nación han tenido que adaptar campamentos para continuar con el levantamiento del censo de damnificados por el paso del huracán Otis en Guerrero y poder comenzar con la entrega de apoyos anunciados por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En el caso de la capital del estado, un grupo proveniente, principalmente de la Ciudad de México, instaló casas de campaña, colchonetas inflables y sleeping bags tanto al interior como al exterior del auditorio Sentimientos de la Nación.
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Hasta hace unos días, este inmueble en Chilpancingo se fijó como el centro de cómputo del registro de los censados debido a la falta de señal de telefonía e internet en Acapulco.
El viernes pasado, un grupo de unos 500 servidores de la nación llegaron en caravana provenientes desde el Monumento de la Revolución y fueron recibidos por la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, así como por la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel.
De acuerdo con la funcionaria federal, a Guerrero han llegado más de dos mil servidores de la nación provenientes de todos el país para apoyar con el censo y posterior entrega de apoyos como parte del plan de Reconstrucción de Acapulco
LP