Después de tres años y dos meses, la Fiscalía General del Estado de Baja California (FGE) cateó una vivienda en la cual durante 2020 se vio por última vez a José Miguel Martinez Villanueva.
Su hermana, Mónica Martínez, denunció que así lo exigió desde que la desaparición de José Miguel, pero nunca le hizo caso el agente ministerial que tenía la investigación a su cargo.
La inspección se realizó a solicitud del Comité Internacional de la ONU, tras una petición de hace varios meses.
“Se tuvo información de que en la casa en donde se está llevando a cabo el cateo, se podría localizar un joven, de 17 años, enterrado en la parte de un cuarto”, expuso mientras llovía en la zona.
Lamentó que esos datos coincidieron con los que obtuvo de forma anónima en 2020.
“Como siempre (la) Fiscalía omite la información y yo, por temor a represalias, ya no continué impulsando porque me estaban amenazando”, recordó.
En la fotografía hay indicios de que José Miguel estuvo en ese domicilio ubicado en la colonia Hacienda Los Laureles.
“Esa pared coincide con una fotografía que en el 2020 me mandaron pidiéndome dinero por él, y hay una posibilidad de que si pueda estar”, detalló Mónica, originaria de Michoacán.
Durante tres días se inspeccionará el inmueble, en donde vive una nueva familia, a quien pidieron salir para efectuar el cateo.
Este miércoles lo harán con el georadar, pero mañana con una máquina excavadora y también el lunes.
José Miguel viajó a Tijuana para celebrar su cumpleaños y pasar las fiestas decembrinas con su hermana.
JLMR