Camila Flores Montoya y Jessica Papadópulos se han convertido en una de las parejas más prometedoras para el pádel lagunero, ya que a sus 14 años no solo han logrado dominar a contrincantes de su nivel, sino también a jugadoras mayores que han sido sorprendidas por la dinámica y efectividad de estas dos grandes contendientes.
Su desempeño en torneos que se realizan en los clubes de la localidad da mucho de qué hablar, ya que han combinado sus habilidades para jugar con tal coordinación que se han convertido en rivales incómodas para las jugadoras adultas a tal grado que tratan de hacerse de artimañas para sacar cualquier tipo de ventaja que, al final de cuentas, no les ha servido de nada.
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Camila se involucró en el pádel desde hace casi dos años por iniciativa propia, ya que se sintió atraída por el modo de jugar y la afinidad que tiene con sus habilidades, además de que le pareció un deporte muy divertido, ideal para pegarle fuerte a la pelota.
“Voy para dos años que comencé a practicar el pádel, la idea surgió como una manera de liberar el estrés de pasar bastante tiempo en el colegio. Fue una iniciativa mía, nadie influyó en mi decisión, ya que cuando acompañaba a mis papás a llevar a mi hermano a jugar futbol, vi jugar pádel y me llamó poderosamente la atención. Supe inmediatamente que era lo mío y le dije a mi mamá que quería practicarlo, así que entré a una clase y me pareció divertido, ya que se está en constante movimiento”, expresó.
Además, el compañerismo que se logra en la cancha y fuera de ella es algo que valora, pues todos comparten experiencias y eso ayuda a crecer como jugador, nadie se guarda nada y esa ayuda mutua provoca respeto y genera un ambiente agradable, donde a pesar de que exista rivalidad alguna, al final del día se siente que hay unión.
Camila entro a las competencias de padel hace un año
Camila comenzó a competir hace aproximadamente un año, tuvo un compañero con el que no le fue nada bien jugando el Anualito del Campestre Torreón, donde entrena. Eso la dejó un poco decepcionada, pero no la hizo renunciar, por el contrario, sintió que podía dar mucho y fue cuando encontró en Jessica Papadópulos la pareja ideal.
Una dupla que encontró perfección en su técnica
La dupla perfecta Camila logró perfeccionar su técnica y eso la llevó a divertirse sin estresarse, así que al ingresar al Torneo Anual del 50 Aniversario del Campestre Torreón, haciendo dupla con Jessica, ambas sorprendieron por su manera de disfrutar cada set.
En algunos partidos, a pesar de ir abajo en el marcador, nunca bajaron los brazos y terminaron dando la vuelta con remontadas que notaban lo bien que lo pasaban juntas y, sobre todo, disfrutando el vencer a mujeres de más edad y experiencia.
“Al Anual entramos en la quinta categoría, ahí nos enfrentamos a personas mayores, señoras que nos veían, quizá, como presa fácil, pero les ganamos y eso las enojaba, pues no concebían que un par de jovencitas las hicieran correr de un lado a otro, incluso trataron de hacernos trampa para quitarnos puntos, pero estábamos jugando bien y nos divertíamos haciéndolas sufrir”, comentó.
Jessica Papadópulos, por su parte, se inició en el pádel cuando en su colegio instalaron las canchas para practicarlo, así que ingresó a la academia en el Campestre Torreón, donde encontró a su ahora compañera.
“Nos sentimos muy bien jugando juntas desde que participamos en el Anual, donde complementamos nuestras cualidades para obtener triunfos sobre las favoritas. Me he sentido muy bien jugando al lado de Camila y enfrentar a señoras nos ha permitido darnos cuenta que podemos llegar lejos”, dijo.
Se siente contenta de tener el respaldo de sus padres y planea seguir ascendiendo de categoría y llegar tan lejos como sea posible en el pádel, sin dejar de lado los estudios, que son su prioridad. Por ahora se encuentra trabajando en mejorar su juego, fortalecer su mejor golpe, que es con la derecha y el remate de volea.
“El pádel me gusta porque todo es rápido, es reaccionar y pensar con rapidez, tener mucha coordinación. Cuando ganamos a las señoras me dio risa porque se enojaban mientras nosotras nos divertiamos”, mencionó.
Sus entrenamientos son de lunes a jueves por la tarde y ya están preparándose para las siguientes competencias que a nivel local se llevarán a cabo en los diferentes clubes de la región, dispuestas a seguir destacando como dupla.
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