Con una escalera con más de 100 años de antigüedad, los rechinidos son la habitualidad para los guías Bertha, Rosabelia, Saúl y Héctor que realizan excursiones diarias, mismos que se exponen al desconcierto pululante de diferentes situaciones y experiencias que ocupan como protagonista a la Casa del Cerro en Torreón, Coahuila.
Erigida en 1904 por el arquitecto e ingeniero Federico Wulff (San Antonio, Texas. 1856), con una arquitectura estilo alemán, dicho recinto posee una ubicación estratégica, logrando una vista panorámica de toda la ciudad. Tras diferentes inquilinos, entre ellos Pancho Villa, quien la utilizó cual trinchera. Fue en 1994 cuando se volvió oficialmente un museo.
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Anécdotas de Bertha Alicia Magallanes
Alicia explicó que entre las cosas sin sentido que ocurren, hay una que quiso destacar, la cual los ha sorprendido en 3 ocasiones seguidas, y tiene lugar precisamente en la habitación del bebé, los últimos viernes del mes.
"Cada último viernes del mes, al abrir el museo, van 3 ocasiones en que al cuarto del bebé, no se le puede prender el foco, lo curioso aquí, es que los días siguientes que llegamos, funcionan con normalidad".
Asimismo, contó que en esa habitación las visitas que, a las cuales brinda la excursión, le han manifestado sentir mala vibra del cuarto, incluso algunos llegando a no querer entrar definitivamente.
La mujer de blanco
La guía Alicia comentó que han ocurrido, coincidentemente, casos de personas que han sufrido una baja anímica al momento de bajar al sótano.
"Una persona me comentó que al mirarse en el espejo se vio a ella misma, pero en otra época, y se empezó a sentir mal, como si le hubiera bajado la presión, la tuvimos que sentar y calmarla porque estaba agitada, me decía 'Es que me veía en otra época' y se le salían las lágrimas, me dijo que ella se veía vestida de blanco, y algo muy curioso es que aquí desde siempre han dicho que se aparece una señora de blanco", relató Alicia.
Anécdota de Héctor Salas
El guía aclaró que a él personalmente no le ha tocado ver nada paranormal, no obstante explicó que sí hay personas que en sus excursiones han platicado que al pasar por ciertas áreas de la casa han sentido escalofríos, además de que notó una coincidencia en los testimonios de las visitas.
"Entre las cosas que me ha platicado la gente, lo que más seguido pasa es que me cuentan que siente como escalofrios en ciertas partes, y con él tiempo he notado que hay una coincidencia muy presente en lo que todos me platican, y esa es que siempre están involucrados los mismos tres lugares: El sótano, el cuarto del bebé, o el baño", contó.
Anécdotas de Saúl Álvarez
Saúl explicó que a un compañero al cual trasladaron a otro recinto cultural, le tocó vivir una experiencia que llegó a inquietar a todos, pues dijo que vio a una persona caracterizada al estilo de otra época deambulando por la casa.
El hombre de otra época por la noche
El guía Álvarez contó que en los eventos de 'Noche de museo', unas personas en la parte de arriba de la casa dijeron haber visto a una persona personificada con un traje antiguo y de negro, llevaba su saco y un particular sombrero tipo bombín.
"Esos visitantes que habían convivido con el hombre personificado, llegaron y felicitaron al compañero que te conté que trasladaron de recinto, le dijeron 'felicidades por la persona que está caracterizada al estilo antiguo, muy atento él y muy sonriente, nada más que queríamos tomarnos una foto con él, pero al momento de que fuimos a buscarlo ya no lo encontramos', y pues fue algo que nos tomó por sorpresa porque, al menos de nuestra parte, nadie planeó que hubiera un hombre disfrazado", relató.
Apagar las luces al cerrar en la noche
Saúl que en una ocasión en que le tocó cerrar por la noche en uno de los últimos viernes de cada mes, dijo que se siente como una especie de mala vibra, al momento de bajar al sótano.
"La verdad, aun así aunque se sienta inquietante y todo, yo pienso que son fantasmas buenos, porque si fueran malos, pues ya nos hubieran hecho algo, pero eso si, durante esos lapsos, en todos lados ves siluetas de reojo, pero uno prefiere no voltear ni poner atención, haces lo que tienes que hacer y te vas. ".
Figuras extrañas en las fotografías de las visitas
Entre la curiosidad que Saúl destaca en sus excursiones, es que las visitas en ocasiones le muestran fotografías donde se aprecian cosas inexplicables, como por ejemplo una donde se puede ver una mano en el hombro de alguien que estaba solo, o la silueta de una persona en el reflejo de un espejo.
Anécdotas de Rosabelia Ríos Garza
Rosabelia contó que anteriormente, cuando aún pasaban un cortometraje que representaba la historia del museo en un área que estaba acondicionada para el video, le ocurrió algo que la dejó desconcertada.
"Teníamos nada más a unas señoras aquí en el video, y yo escucho que vienen bajando por las escaleras, y a como si esa persona fuera cansada, iba bajando haciendo como un tipo de sollozo, pero entonces me percate que no estaba escuchando la madera de la escalera crujiendo, pero si la agitación de su aliento, que se acercaba más y más, llegó un punto en que se acercó tanto que voltee para ver quien bajaba para atenderlo, pero no vi a nadie, y me quede con la palabra en la boca", relató.
La muñeca en el cuarto del bebé
Rosabelia destacó que en su trayectoria de 24 años como guía, entre las cosas que siempre se le indicaron, fue precisamente no tocar por nada del mundo a la muñeca que está encima de la cama.
"Desconozco por qué o qué, pero desde siempre y de manera seria siempre me dijeron que esa muñeca no se tocaba, quien sabe muchas de esas cosas al ser donaciones, desconocemos sus procedencias", finalizó.
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