Con una temperatura de 36 grados y el calor intenso bajo la techumbre principal de la Unidad Deportiva de Gómez Palacio, en la colonia Filadelfia, este domingo miles de laguneros esperaron impacientes la llegada de Andrés Manuel López Obrador en punto de las 3:00 de la tarde.
Una mujer llorando se aferró a su brazo para exigir justicia gritando “me mataron a mi hijo”, mientras las pancartas de todos tamaños y colores con mensajes como "No al metrobus", "Becas para todos" y "Justicia", se observaban en lo alto y sobre las vallas de retención a lo largo y ancho del lugar.
Niños, adultos y personas mayores aclamaban la llegada del presidente, quién presentaría 'la tanda del bienestar' y el 'corte de caja' de los programas sociales.
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Alrededor de las 3:25 arribó la alcaldesa electa Marina Vitela, quien fue recibida con aplausos y felicitaciones por los simpatizantes de Morena.
En tanto la actual presidenta municipal, Leticia Herrera, no corrió con la misma suerte cuando a su llegada a las 3:48, sería ovacionada negativamente, aún así mostrando gentileza saludó a los ciudadanos, les dio la mano y se instaló en el presidium.
Fue a las 3:52 que al fín llegaría AMLO, quien acostumbrado a la aclamación enérgica de la gente en cada evento al que se presenta, recibió muestras de aprecio y cariño, así como escritos con peticiones de variadas demandas y gritos de "¡Estancias sí, estancias sí!" y consignas contra el metrobús y la empresa Chemours.
Mientras sus colaboradores recibían por todas partes carpetas con las peticiones, López Obrador se detenía a saludar a los asistentes que expresaron a gritos sus necesidades y aclamaciones.
SE 'CALENTARON' LOS ÁNIMOS
El gobernador de Durango, José Rosas Aispuro, fue quien abrió el presidium con un marcado discurso que sería recibido con fuertes abucheos y rechiflas.
Bajo el techumbre retumbaban los "¡Fuera, fuera!", mismos que le hicieron interrumpir su discurso de peticiones de mejoras para La Laguna en dos ocasiones.
“Ustedes me dicen a qué horas terminan para seguir diciendo al presidente lo que se necesita, ¿Puedo terminar ?, ¿Sí?", insistió tras asegurar que él sí tiene valor para dar la cara.
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“Más allá de las palabras porque las palabras, muchos de ustedes, vienen y gritan acá y cuando tienen que dar la cara no tienen el valor para hacerlo. Yo sí lo tengo y puedo hablar de frente porque no le debo nada a nadie, porque no me he robado ni un centavo, le puedo hablar a todo mundo de frente”, comentó.
Y agregó: “Ustedes muchos de los que aquí están representan intereses oscuros y no tienen la calidad moral para dar la cara”.
LA CONSULTA ESPONTÁNEA
En su turno, Andrés Manuel López Obrador dio un ligero regaño a los asistentes, diciendo que “ya chole”, con las faltas de respeto a la autoridad y convocó de nuevo a la unidad para crear desarrollo en La Laguna, acabar con la pobreza y la corrupción y mejorar la calidad de vida de los duranguenses.
También convocó a los presentes a levantar la mano para decidir si se construye o no el Metrobús de Durango. Así determinó cancelar esa obra y luego sometió a votación a mano alzada en qué se destinaría ese recurso, por lo que la gente votó por agua y después por construir el hospital que quedó en infraestructura y carente de medicinas, equipo y personal para operar.