Viuda de candidato asesinado lo suplió, ganó y no tiene miedo

Hasta que su esposo fue asesinado a tiros, María del Carmen Ortiz era ama de casa. Hoy, tres meses después del atentado, es alcaldesa electa de Apaseo El Alto, uno de los municipios más peligrosos de Guanajuato.

Fue el 11 de mayo cuando José Remedios Aguirre, candidato por la coalición de Morena-PES-PT a la alcaldía de Apaseo, fue baleado al terminar un mitin en el Parque Ecológico del municipio. Con el luto y el miedo a cuestas, y apenas dos días después del homicidio, Carmen decidió tomar las riendas de la candidatura, con la bandera de la seguridad como principal promesa de campaña. Y triunfó.

“Voy a responder a la gente que nos eligió: yo no me bajo de este barco. Les voy a demostrar que como mujer puedo lograr y voy a hacer cosas grandes y voy a lograr a hacer ese impacto social, que quiero dejar huella en Apaseo”, dice emocionada.

La alcaldesa electa tiene 32 años y en los próximos días espera comenzar a estudiar la carrera de Ciencias Políticas en Querétaro, a menos de media hora de Apaseo El Alto.

Carmen Ortiz usa la oficina de su esposo en la empresa de seguridad privada de la familia para dar entrevistas, reunirse con su equipo de trabajo y planear la estrategia del gobierno municipal que va a encabezar durante los próximos tres años.

Sus nuevas actividades las combina con el cuidado de sus tres hijos, todos menores de edad, quienes ahora cuentan con escoltas, igual que ella.

“En un principio me sentía con temor, pero siempre lo he dicho, existen dos tipos de miedo, el que te paraliza y el que te mantiene activo y ese miedo también lo tomé como fuerza, como coraje para sacar adelante este proyecto”, dijo.

La alcaldesa electa habla poco sobre el crimen de su esposo. Asegura que fue un asesinato político porque superaba dos a uno a su más cercano contendiente, pero… hace memoria y no recuerda ninguna amenaza. Y sobre las acusaciones del gobierno estatal que lo vinculan con huachicoleros, prefiere no hablar. Dice que las autoridades harán su trabajo y revelarán la verdad.

Eso sí, entre los primeros planes de su gobierno están mejorar la seguridad, tener coordinación para combatir el robo de combustible y generar oportunidades de empleo para mujeres viudas, como ella.

“La prioridad, la número uno, es la paz y la tranquilidad para Apaseo el Alto, porque es lo que exige la ciudadanía; lejos de pedirte una calle, un techo, un baño, un drenaje, un alumbrado, lo que piden es la tranquilidad y la paz para Apaseo El Alto”, narra.

EN MEDIO DEL HUACHICOL…

Apaseo el Alto está al sur de Guanajuato, colinda con Querétaro y Celaya. Por aquí pasan los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex)provenientes de la refinería de Salamanca. El robo de combustible ha desatado una crisis de inseguridad en esta región.

De acuerdo con los reportes oficiales de Pemex, en 2017 y en lo que va de este año, Guanajuato se ha mantenido entre los primeros tres estados en tomas clandestinas.

El año pasado registró mil 852, es decir, el estado con más robos de ductos, y hasta mayo de 2018, ya sumaban 758, solo detrás de Hidalgo (769) y Puebla (1025).

El 30 de agosto pasado, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en 2017 Guanajuato se ubicó en el tercer lugar nacional de víctimas de homicidio, con 2 mil 252, solo detrás del Estado de México (3 mil 46) y Guerrero (2 mil 578).

Esta cifra significa un incremento de 83 por ciento en homicidios respecto a los mil 232 registrados en 2016 en todo el estado.

PELEAN LA PLAZA

Los empresarios de Apaseo aseguran que la delincuencia común no es problema en el municipio, es decir, la población no sufre de robos o asaltos. El peligro es que en cualquier lugar, en cualquier momento, se puede desatar una balacera mientras buscan asesinar a una persona.

Ellos tienen claro que se trata de grupos delictivos que están peleando controlar la zona para poder robar combustible de los ductos de Pemex.

“Aquí lo que nos hemos dado cuenta, pienso, no estoy seguro como ajuste de cuentas o andarse peleando aquí la plaza porque así a personas comunes y corrientes como la mayoría no les afecta, según se da entre gente que se dedica a la delincuencia organizada, nada más.

Es importante que el gobierno del estado junto con el federal y municipal se pongan de acuerdo, el problema aquí es los ductos que pasan de Pemex, cuando haya un mejor control en ese aspecto, yo creo va a bajar la cuestión de la delincuencia y porque ese es uno de los factores por los que se están peleando la región”, explicó Álvaro Mendoza, empresario transportista de la zona.

Mendoza asegura que las ventas para su sector, así como para restauranteros y vendedores de muebles, han bajado 25 por ciento en los últimos meses por la mala percepción de seguridad que tiene el municipio.

Él es uno de los pocos que se anima a hablar frente a la cámara, pues aunque no existen amenazas directas, el miedo de molestar a la persona equivocada es latente. Por eso, insiste en que la prioridad para el próximo gobierno, el de Carmen Ortiz, es la seguridad.

“Ella dijo, fue lo que escuché, que la seguridad iba a ser lo principal, ojalá y lo cumpla”, concluyó.