En 2014 la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas decretó que cada 21 de junio se celebraría el Día Internacional de la Yoga con el propósito de promover sus beneficios.
Pese a que muchos consideran que la yoga es un ejercicio de relajación y estiramiento, en realidad esta práctica milenaria originaria de la India pretende poner en sincronía el cuerpo, la mente y el espíritu a través de técnicas de respiración, posiciones que te harán consciente de tu cuerpo y meditación.
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Entre los beneficios de practicar yoga está la disminución de la presión sanguínea, aumento de la densidad ósea y por supuesto, reducir el estrés y la ansiedad. Sin embargo, al ser una práctica que se guía por creencias budistas o hinduistas hay diferentes tipos de yoga que varían, principalmente en las posiciones y los mantras que se cantan.
Por eso, y para que celebres el Día Internacional de la Yoga como se debe, enlistamos siete de los tipos de yoga más populares en México.
Hatha
Este tipo es el más común y consiste, básicamente, en una introducción a las poses tradicionales de la yoga, por lo que no esperes un gran desafío físico o salir sudando. Lo único que hace es que ayuda al estiramiento y relajación de los músculos.
Al ser un repaso de las poses básicas, las clases que ofrecen este tipo de yoga suelen ser bastante ligeras, por lo que son aptas para casi todas las personas, pues recuerda que si sufres de problemas de espalda, cintura o de articulaciones, debes consultar a tu médico antes.
Bikram
Esta escuela de yoga fue desarrollada por Bikram Choudhury con el objetivo de sintetizar y hacer mucho más fácil la yoga hatha. Se caracteriza por tener una serie de 26 posiciones básicas que se repiten dos veces a lo largo de 90 minutos. Sin embargo, lo más interesante de la yoga Bikram es que debe hacerse en un cuarto a 40°C con una humedad al 40 por ciento, por lo que seguro vas a sudar.
Algunos estudios ofrecen una variación de este tipo de yoga bajo el nombre de hot yoga.
Kundalini
Esta escuela de yoga tiene influencias hinduistas del tantra y su principal objetivo es despertar la energía kundalini (serpiente en sánscrito) que se localiza en la base de la columna vertebral para así, activar los chakras.
Por esta razón, se usan posiciones y movimientos demandantes que se acompañan de mantras y técnicas de respiración.
Ashtanga
Esta escuela ofrece una experiencia mucho más dinámica, pero aquí se sigue una secuencia de posiciones que deben sostenerse a lo largo de cinco respiraciones y un “saludo al Sol” cada que hay cambio de posición
Vinyasa
Este tipo de yoga retoma algunas poses del estilo tradicional ashtanga para darle un toque más aeróbico. Si acudes a una de estas clases, te recomendamos que ya tengas algo de práctica previa con algún tipo de yoga más relajada, pues los cambios de pose se dan mucho más rápido para que logres estirar tus músculos al mismo tiempo que haces ejercicio.
En algunos lugares, la yoga vinyasa se conoce también como power yoga, flow yoga o yoga dinámica.
Yoga restaurativa
Si lo que buscas es relajación, entonces ésta es para ti. Su objetivo es sanar la mente y el cuerpo a través de cinco o seis poses que debes sostener durante 20 minutos con la ayuda de cintas, almohadas, pequeños bloques y hasta mantas para que no hagas mucho esfuerzo y logres despejar tu mente.
Yoga prenatal o para adultos mayores
Estas clases están diseñadas con poses que fueron adaptadas para proteger al bebé en el caso de las futuras mamás o cuidar las articulaciones de los adultos mayores. Su objetivo es fortalecer los músculos para ayudarlos en su vida diaria.
mrf