Realizar tus sueños. Todos estamos en busca de realizar eso que de niños y de niñas soñábamos. Algunos quieren ser abogados, hay quienes desean ser grandes actrices, el mejor vendedor, la mejor cirujana, pero ellas sueñan con ser Miss Universo.
La verdad yo sé poco o casi nada de este tipo de certámenes, pero tuve la oportunidad de conocer y platicar con tres mujeres, cada una de diferente estado de la República Mexicana, tres de las 33 finalistas de Miss Universe México, de la que solo será una la gran elegida para la justa internacional.
- Te recomendamos Miss Universo México 2024: Cuándo y dónde ver a la ganadora Estilo
MILENIO pudo platicar con Pamela Ulacia, representante de Morelos; Valeria Valverde, de Chihuahua; y Kathia Maldonado, de Sonora. Sentadas, cada una en una silla, platicaron de las seguridades, pero también de las inseguridades; de las exigencias, pero también de las vulnerabilidades; del público que las va a juzgar, pero también de las familias que las apapachan.
El reto y la evolución
El día que se hizo la entrevista, aún en Ciudad de México, tenían pocas horas de haber llegado a ese monstruo de edificio en Santa Fe. Sus sonrisas, sus celulares llenos de fotografías y la emoción se notaba, pero no era suficiente para asimilar lo que estaban viviendo y lo que estaba por venir.
"La evolución de como empezamos a lo actual ha sido agigantada", inició Valeria Valverde, quien lucía un elegantísimo vestido en color negro.
"Seguridad" es una palabra que se encontrarán mucho en este texto porque si con algo hablan es con eso. Pamela contó que, aunque su conocimiento de estos eventos no era muy buena al principio hoy se siente cobijada por las otras 32 mujeres que con ella han crecido: "Ha aumentado mucho mi seguridad. Yo comencé y no sabía casi nada de certámenes y creo que me sentía muy insegura, pero he tenido buenas compañeras que me han enseñado bastante".
Y sí, muchos pensarían que hay una rivalidad intensa y macabra dentro de una Miss Universo, pero no es así. La complicidad y sororidad se palpa cuando uno está cerca y justo de eso habló Kathia.
"Todas tienen algo bueno que aportar. Siempre tienes que tener la mente bien abierta de que hay algo que puede brillar demasiado y puedes obtener una luz de ahí. Todas han brindado algo que me han hecho la que soy ahorita porque no soy la misma de hace dos meses", dijo siempre con una sonrisa.
La familia y siempre los abuelos
La familia en América Latina es de vital importancia: nos levantan cuando ya no podemos más, nos protegen, nos acarician y curan, pero ¿qué dice una familia a una posible futura Miss Universo?
Pamela: "Desde el momento que yo le dije a mi mamá (ella ha cuidado mis sueños) entró en shock y me decía que no lo podía creer porque yo de chiquita veía Miss Universo y quería ser una de ellas. Entonces mi familia está muy feliz y orgullosa porque me aferré a eso".
Kathia: "Mi motor de mi vida es mi familia. Son los que me impulsan a dar lo mejor de mí, a ser yo, a no dejar de ser Kathia. Al principio no se la creían y luego representar a mi estado fue un orgullo, pero no cabían de la emoción. Me han apoyado con todo".
Valeria: "Estamos llenos de dicha y celebración porque es un logro de familia, amigos, todos son parte de este proceso".
En México una de las figuras más fuertes dentro de una familia son los abuelitos y las abuelitas. Esos seres con súper poderes que logran ver en nosotros algo que nadie más ve y los abuelos de estas tres mujeres así lo hicieron, así lo contaron Valeria y Kathia.
"Algo que me mencionaba mucho mi abuelo, que ya no está con nosotros, era que yo sería modelo", dijo Kathia.
"Mi abuela me dice 'te transformas'", remató Valeria.
¿Cómo se cuida una Miss Universo México?
Mas que una dieta ultra rigurosa, Valeria, Pamela y Kathia se enfocan en lo mental. Saben que la exposición en esto es y será cada vez más intensa y es por eso que priorizan en estar bien con ellas mismas para que nada pueda tumbarlas.
Pamela: "Nos hemos cuidado desde hace mucho tiempo; yendo al gimnasio desde hace cuatro años; una dieta balanceada. El tema de la salud mental es muy importante y saber que críticas siempre va a haber y yo trato de verlas como una oportunidad de trabajo".
Las redes sociales han jugado un papel muy importante. Basta con meterse al Instagram de las 33 chicas para ver todos los comentarios que a diario reciben.
Valeria: "Conocer quién eres es la clave para que nada te tumbe. Estamos muy expuestas en redes sociales; siempre trato de mandar el mensaje de que todos somos amor".
Pamela: "Las redes sociales son un arma de doble filo porque te pueden alabar y te pueden destruir; no hay que enfocarte en comentarios malos. Yo trato de enfocarme en lo positivo".
Kathia: "La gente, ya estando en la final, va a hacer critica de cómo hablas, qué expresas, qué comunicas, todo. El chiste es no tratar de apantallar porque se te olvida quién eres".
El ser mexicana aquí y en todas partes
Al ser de cada estado del país nos podemos encontrar con mujeres de todo tipo, muy diferentes, pero todas siendo mexicanas y sobre todo, dejando atrás aquellos estereotipos que por años han existido.
Pamela: "Hay bastante diversidad. Todas somos diferentes y eso me gusta mucho porque la organización nos deja ser auténticas. Ya se cambiaron los estereotipos de ver a la mujer mexicana de una sola forma poque nuestro país es muy grande. Las mujeres mexicanas somos bien cálidas y eso es lo que hace la gran diferencia".
Aquí la envidia no existe, aquí la amistad reina; "Yo tenía miedo de entrar porque se corrían rumores que eran malas y no he sentido esa rivalidad entre ninguna; me han ayudado a crecer", dijo Kathia mientras volteaba a su izquierda y a su derecha.
Se acababa el tiempo y detrás de ellas se encontraban las banderas de Miss Universo y de México, lancé la última pregunta: "¿qué sienten al verlas?"
"Llegué y fue como niña chiquita; me tomé fotos y las mandé a mi familia porque es un orgullo", terminó Valeria. Por su parte, Pamela y Kathia casi se ponen de acuerdo para exclamar: "estoy viviendo el sueño y el sueño de muchas".
DAG