Beber cerveza con popote es una acción que suele evitarse, debido a la creencia popular de que aumentará la sensación de ebriedad en menos tiempo. Sin embargo, esto se trata de un mito que ha pasado por varias generaciones a lo largo de los años.
Por ejemplo, existe la creencia de que la cerveza no debe beberse con espuma. No obstante, los expertos y productores de esta bebida aseguran que debe servirse con al menos 1 o 2 dedos de espuma para protegerla de la oxidación.
De igual forma, cuando las personas piensan que una cerveza en lata es de menor calidad, cuando en realidad, la lata es el mejor envase para esta bebida debido a que no permite el contacto con la luz y a su vez, se ve afectada la fermentación.
Por otro lado, también existe el mito sobre los nulos beneficios de la cerveza para la salud, que a pesar de no ser recomendable para el consumo diario o excesivo, diversos estudios han encontrado que la cerveza contiene algunos nutrientes como el potasio, magnesio, calcio y fósforo.
¿Beber cerveza con popote aumenta la sensación de ebriedad?
La respuesta es no, lejos de lo que se pudiera pensar, el verdadero efecto de tomar cerveza con un popote o con cualquier bebida alcohólica es que se ingiere con mayor rapidez a diferencia de los tragos.
Entonces, si se bebe alcohol de forma acelerada, existen más probabilidades de consumo excesivo y por lo tanto, la sensación de embriaguez que trae como consecuencia la cruda.
Sin embargo, esto también dependerá de otros factores como la cantidad de alcohol que se ingiere y el metabolismo de la persona, ya que este último trabaja de una forma diferente.
No obstante, cuando se exceden los límites de cada organismo, la consecuencia será la sensación de embriaguez y los estragos de la cruda.