Al ingresar a Maison México, en la colonia Roma, las sorpresas se van dando a cada paso, porque la dualidad que ofrece el hotel para el pleno y cómodo descanso en Ciudad de México no se imagina.
Nadie piensa que la histórica casona de principios del siglo pasado —que conserva en su frente— con el número 100 de la calle Valladolid es una continuación del moderno edificio que fue construido a su lado.
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Ahora ambas forman un solo concepto, que tiene como objetivo la segura experiencia de relajación del huésped, que puede elegir entre alguna de las nueve habitaciones que conservan el espíritu colonial que distinguió a la edificación, o bien seleccionar uno de los 16 cuartos que, con detalles minimalistas, se ubican en la parte moderna de Maison México. Lo mejor es que todas son acogedoras e invitan a una estancia, aún siendo habitante de esta ciudad, gracias al talento creativo del despacho de arquitectos, integrado por Javier Sánchez, Aisha Ballesteros y Benedikt Fahibush.
Habitaciones únicas
La elección va en función del gusto, porque lo extraordinario de las 25 habitaciones es que todas son diferentes; cuentan con una terraza, iluminación y ventilación, incluso hay algunas con una vista a la naturaleza que forma parte de la acera. Así que solo basta abrir la puerta o la ventana para disfrutar del frondoso árbol y el canto de los pájaros, desde la comodidad de la habitación.
Y aunque el concepto de las habitaciones invita a permanecer ahí, el hotel cuenta con espacios que coquetean para que la experiencia en Maison México sea más versátil. Y van desde el lobby, donde la bienvenida es un preámbulo a la grata experiencia que está por iniciar, hasta un recorrido por las escaleras y su estructura en caracol, que permite disfrutar del espacio abierto, al que en esta época se suma el sonido natural de la lluvía.
Consentir al paladar
Octavia y Conchita son las áreas para consentir al paladar; Octavia en el sótano, donde se puede disfrutar del desayuno y comida en los menús que propone el chef Jonathan Gómez Luna (Estrella Michelin por Le Chique), con su cocina de autor e ingredientes nacionales, en un ambiente que también recrea la vista al poder contemplar el diseño arquitectónico que distingue al edificio.
En contraste, justo en el rooftop del hotel, se ubica Conchita Clement Raw Caviar Bar, el restaurante donde la chef Valeria Sánchez ejecuta la propuesta del chef Franco Maddalozzo. Ahí la variedad es amplia, y va desde platillos de mar hasta cortes y ricas pastas, mientras se disfruta de la vista a toda la colonia Roma; la fiesta para los sentidos puede iniciar desde el desayuno y terminar con una cena romántica.
Y, además
Lo que vieneComo parte de los atractivos que ofrece Maison México en la Roma también se prepara un speakeasy, del que se ultiman detalles y que está siendo asesorado por Handshake.
El concepto se empezó a construir en pandemia y fue hasta dos años después cuando hubo oportunidad de adquirir la casona de Valladolid esquina Tabasco; sin embargo, la idea fue respetar el espíritu de la construcción, por eso aunque se manejan bajo un mismo concepto y cada propuesta tiene su personalidad.
DAG