Jubilado recrea juguetes de antaño

El italiano Mario Collino fabrica artefactos con los que se divertían los ancianos de pequeños.

Cada juguete lleva su historia o su anécdota, en italiano o en piamontés. (AFP)
Agencia AFP
Italia /

Mario Collino eligió como nombre artístico “Señor Perejil" o “Prezzemolo" en italiano pero bien habría podido inspirar al personaje de Geppetto, padre de Pinocho. Cerca de Cuneo, Italia, este jubilado recrea juguetes de antaño a los que da vida.

Desde días antes de Navidad, el Señor Perejil abre sus maletas y saca sus tesoros, en escuelas, asilos o mercados. Tocado con un sombrero, de barba frondosa y ojos vivarachos.

Un pisotón y Michel, muñeco de madera y alambre, trepa por la cuerda. Un movimiento de su pañuelo, y el conejo mueve las orejas. Unos cuantos pliegues de papel y una rana surge tras la cabeza de un niño estupefacto.

"Nunca me he hecho publicidad, ha sido de boca en boca lo que me ha dado a conocer y hago 80 salidas al año. No pido nada, a veces me pagan el hotel, la comida o el café", afirmó el ex empleado del grupo francés Michelin.

HECHO EN CASA

En 1989, se le ocurrió preguntarle a la gente mayor con qué jugaban cuando eran chicos.

“Dos años antes hubo una exposición sobre los juguetes pobres. Era injusto llamarlos así, un juguete nunca es pobre, es algo que enriquece, que hace feliz. ¡Pobre es el que no tiene!", señaló.

Desde entonces recorre las residencias de ancianos para que le describan cómo jugaban en otro tiempo. “Hago un dibujo, vuelvo a casa, fabrico algo y luego regreso a ver a la persona para saber si es eso a lo que se refería y si puedo presentar el juguete con su nombre. Por ahora, he hecho 138".

Cada juguete lleva su historia o su anécdota, en italiano o en piamontés. Ni se compran ni se venden, todos los fabrico en casa.

"No me gusta hablar de reciclaje, prefiero 'reutilizable'. No me da vergüenza, la gente tira cosas muy interesantes", contó.

“Tengo 71 años, ¡pero aquí dentro tengo 15!", exclamó. “¡Menos, menos!", le corrigió su esposa, Ombretta, mientras reía.

“El Señor dice que 'si no os convertís y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos'. Me he tomado eso al pie de la letra: ¡juego!".