Mezclan español e inglés al hablar, presumen de sus viajes en redes sociales y procuran no juntarse con las clases populares. Así son los whitexicans, un término que define a personas que muestran orgullo por México en el extranjero pero adoptan actitudes clasistas y racistas dentro de su país.
Una exitosa cuenta de Twitter llamada Cosas de Whitexicans, que ha acuñado el concepto, se ha convertido en un azote humorístico contra el postureo de esta clase de mexicanos que tienen unos hábitos más basados en las apariencias que en las convicciones.
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Se ríen de esas personas que "emprenden con dinero de sus papás", "salen del país durante un corte de agua", "van a pasar el fin de semana a Las Vegas", "hablan en inglés con sus amigos blancos" o "creen que la gente más bonita de Ciudad de México se encuentra en la Roma y la Condesa", dos barrios llenos de extranjeros.
Y con un ojo puesto en la actualidad, también se mofan de las preocupaciones que los whitexicans expresan en redes sociales para poder llenar el tanque de gasolina de su vehículo de alta gama o por la llegada de migrantes centroamericanos a la frontera sur del país.
Aunque el neologismo whitexican proviene de las palabras en inglés "blanco" y "mexicano", uno de los administradores de la cuenta de Twitter contó a Efe que este concepto "no tiene tanto que ver con el color de piel como con ciertas actitudes de una minoría mexicana muy privilegiada".
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La imagen que ilustra el perfil de la cuenta muestra al excandidato presidencial Ricardo Anaya, un político blanco y conservador que presumía de hablar inglés y francés, rodeado de banderas estadounidenses.
Debajo de Anaya, aparece un grupo de modelos blancos con rasgos europeos que lucen una de las chamarras con el bordador Mexico is the shit" (México es chingón), muy popular entre jóvenes millennials, blancos y acomodados.
"Nos da mucha risa la gente que usa esta chamarra. Suelen ser personas muy orgullosas de ser mexicanas cuando están en Estados Unidos, mientras que en México no hacen nada por su país y les da igual la pobreza", señaló el responsable de la cuenta, que prefiere mantenerse en el anonimato.
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Con más de 54 mil seguidores, este perfil de Twitter ha gozado de una buena acogida por parte de los usuarios que la consideran "chistosa", aunque sus creadores han recibido también "muchísimos, muchísimos
comentarios insultandoy llamándonos resentidos".
"Hacemos burla de una clase muy alta y a nadie le gusta que se burlen de uno y sobre todo cuando nadie se burla de ti", aseveró el administrador, quien confesó que los tres amigos que crearon el perfil en octubre del año pasado también pueden haber actuado alguna vez como un whitexican.
De hecho, los tres son mexicanos de clase media que estudiaron en una universidad privada, lo que les ha permitido "conocer bien ambos mundos" y les ha "ayudado un poquito a hacer este humor".
Pero de esas burlas aparentemente banales también subyace una fuerte crítica política contra todo aquello que contribuye a perpetuar el clasismo y el racismo arraigado en la sociedad mexicana.
En el punto de mira de su crítica mordaz estuvo una polémica campaña publicitaria de una cervecera que pretendía difundir un mensaje antirracista con el lema "orgullosamente indio", pero todos sus modelos eran blancos.
Tampoco se salvó el reality show "Made in Mexico" de Netflix, que mostraba la opulencia de un grupo de jóvenes adinerados y elitistas de Ciudad de México que querían romper el tópico de que los mexicanos van en burro y llevan sombrero.
Pero la palma de oro se la llevan aquellos que cuestionan en redes sociales el talento y critican el aspecto de Yalitza Aparicio, nominada al Óscar a mejor actriz por la película Roma, por su origen indígena y no tener formación interpretativa.
Como relata la descripción de "Cosas de Whitexicans", son comentarios propios de "mexicanos más gringos que los gringos".
mrf