La época navideña en México se ve adornada no solo por el típico pino con decoraciones, sino además por la flor de Nochebuena que por su color rojo característico sin duda se ha vuelto uno de los símbolos más importantes para estas fiestas de fin de año que son las favoritas de muchos.
El verdadero reto de esta planta es mantenerla bonita, ya que al ser una especie de temporada no todos conocen los cuidados que debe de tener para preservarla tan bella como cuando se adquiere y que dure la flor hasta enero, mínimo para los primeros días.
Cómo mantener bonita la Nochebuena
Lugar
Lo primero que debes de tener en cuenta es el espacio donde permanecerá la maceta ya que debe estar en un sitio templado que oscile entre los 15° a 25° centígrados. Como otras plantas ocupa estar en clima fresco, pero en donde no le pegue el aire, ya que eso afecta sus hojas.
Riego
Algo muy importante es la cantidad de agua que se aplica. En el caso de la Nochebuena basta con que la tierra se mantenga lo suficientemente húmeda sin llegar a mojada para que se mantenga firme. De preferencia se recomienda regarla dos veces por semana aunque dependerá de que tan pronto absorba el líquido.
Un consejo importante es que el agua debe de aplicarse directamente a la tierra y no a las hojas ya que esto podría resultar contraproducente.
Luz del sol
La Nochebuena también necesita de la energía del sol ya que con esto mantiene su color rojo o cualquiera que haya sido la elección, además previene que no se marchite. La luz solar debe de ser indirecta porque la exposición prolongada también podría afectar la planta.
Trasplantarla
Esta flor puede crecer aún más, por lo que cuando pasen estas fechas decembrinas se puede sembrar en un espacio aún más grande como el jardín para que retoñe en una planta que puede alcanzar hasta los 5 metros y que brotará sus colores en el próximo invierno, decorando nuevamente el hogar.
Es importante resaltar que aunque la Nochebuena ya no tenga sus ‘pétalos’, que en realidad son hojas con color, y sea únicamente de color verde, esto no quiere decir que ya se vaya marchitar, simplemente sigue su ciclo de floración que termina por febrero. No se debe tirar, ya que se puede seguir cuidando para la siguiente temporada.
Para cuidarla el resto del año se recomienda regarla una vez a la semana y cuidar que su exposición a la intemperie sea la debida.
ARP