¿Te imaginas no poder orinar por horas o incluso días? Sin duda es una sensación que debe ser muy incómoda. Pues esto lamentable afecta a varios gatos debido a que presentan problemas urinarios que pueden poner en riesgo la vida de los michis si no son atendidos de inmediato.
La mayoría de los dueños de gatos no se dan cuenta del problema hasta que el gatito comienza a sentirse realmente mal y a dejar de comer. A continuación, te contamos por qué los gatos pueden dejar de orinar y qué hacer para evitar que tu michi termine en el quirófano de emergencia.
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¿Por qué los gatos pueden dejar de orinar?
De acuerdo con Purina, la razón por la que un gato puede dejar de orinar es debido a problemas urinarios que se derivan por diversos factores como:
Cistitis. Es una inflamación muy dolorosa y que se puede detectar al ver sangre en la orina. Además, también se bloquea la uretra en los machos.
Cálculos en la vejiga. Estos son pequeñas partículas, también llamadas cristales, son parecidas a arena y se alojan en la vejiga. Cuando se acumulan demasiados cálculos llegan a obstruir la uretra y por lo tanto impedir el paso de la orina. Estos pueden originarse debido a una mala alimentación de los gatos.
Infección bacteriana del tracto urinario. Aunque es poco común, hay gatos con diabetes o deficiencias renales que pueden presentar infecciones.
Anomalías anatómicas. Los mininos pueden nacer con alguna anomalía en el tracto urinario o desarrollarlas como consecuencia de un traumatismo.
Edad y peso. Los michis con sobrepeso, aquellos que están sometidos a mucho estrés o que tienen una edad avanzada podrían presentar algún tipo de problema urinario.
Señales de que un gato no puede orinar
Debes estar muy atento del comportamiento de tu minino, por ejemplo si notar que no come o toma agua, incluso si no es tan juguetón como antes y se la pasa acostado. También checa si en su arenero no hay suficientes “pruebas” de que orinó.
Otra señal es que probablemente este orinando en lugares donde no lo hacía como muebles, mesas o cualquier otro. Aunque en un principio te puedes enojar, toma en cuenta que tal vez tu mascota está queriendo decirte algo.
Por otra parte, la sangre en la orina o quejidos de algún dolor, son alertas rojas que no debes pasar desapercibidas. Acude lo más pronto al veterinario para que cheque a tu mascota, incluso pueden realizarle alguna prueba de sangre para checar si tiene alguna infección.
¿Cómo evitar problemas urinarios en mi gato?
Uno de los hábitos que pueden evitar que los gatos presenten problemas urinarios es que tengan una buena alimentación, por ejemplo, darles atún, carne de pollo o res cruda, en especial ésta última evitará que se formen cristales en la vejiga. Otro factor importante es que tu gato evite en parte la comida seca y tome suficiente agua.
También es aconsejable checar si tu michi vive estresado, en caso de ser así puedes empezar por pasar más tiempo con él y distraerlo con algún juego. Con esto evitarás una cistitis.
En caso de que ya estés en el veterinario y te mencione que tu gato tenga la vejiga congestionada, lo más probable es que por medio de un procedimiento llamado sondeo uretral intenten “destaparlo” y así pueda orinar, pero hay casos en los que lo someterán a una cirugía que puede ser de alto riesgo.
PJG