La Copa del mundo de Italia 1990 fue un verdadero reto para Argentina, pues después de ganar en México 1986 el impulso no era el mismo. Empezando por su figura Diego Armando Maradona, quien llegaba con molestias en el tobillo y hasta una uña encarnada e infectada.
La potencia ya no era la misma; sin embargo, no se dejaron llevar por la presión que representaba enfrentarse a un Brasil en octavos de final que contaba con nombres como el de Dunga, Alemao, Careca y los recién integrados Romario y Bebeto.
Ante un Stadio delle Alpi con 71 mil espectadores presentes y un calor desastroso, con 34 grados a la sombra, la FIFA permitió pausas para rehidratación algo que no le agradó demasiado al director técnico Carlos Bilardo, pues llegó a decir que todo debería ser al reves “no darle ni agua, pues el fair play fue un invento de los británicos”.
Con el marcador en ceros al minuto 39 los argentinos estaban sufriendo y Bilardo aprovechó durante una de las pausas para decirles a sus jugadores que si le seguían “dando a los de amarillo iban a perder”.
Una barrida de Ricardo Rocha a Troglio provocó otra pausa y el fisioterapeuta Miguel di Lorenzo, junto al médico, salieron a atender junto a unos extraños bidones de agua, unos verdes y otros transparentes. Uno de los jugadores argentinos se acercó a beber agua y cogió de los verdes, pero de inmediato le avisaron que de esa agua no debía beber, lo escupió. Levantando sospechas del equipo rival.
Cláudio Vaz Leal, mejor conocido como Branco, presuntamente tomó de esas botellas prohibidas y comenzó a sentirse mal y aunque lo reportó a su técnico, no le dieron importancia. Ese día gracias al gol de Claudio Caniggia, Argentina venció a Brasil y accedió a la final donde quedaron subcampeones al caer ante Alemania.
Una conversación con el reportero de El Gráfico donde Bilardo dijo que “Algo voy a inventar, no sé qué, pero algo será; este partido con los brasileños tenemos que ganarlo, ya vas a ver…” cobró sentido 14 años después cuando Maradona reveló a carcajadas qué había sido lo que realmente pasó en un programa de televisión, cosa que fue negada por Bilardo y Galindez.
Se menciona la flunitrazepam, una droga conocida por sus enormes efectos sedantes que a corto plazo puede producir dolores de cabeza, náuseas, vértigos, desorientación, mareos, confusión, como la causante de las sensaciones de Branco.
MGC