Lionel Messi tenía cuatro años cuando comenzó su carrera futbolística con mayor seriedad. Si bien la pelota siempre lo acompañó, aquel episodio en el que su abuela, Celia, insistió para que lo dejaran jugar un partido con niños más grandes, marcó su destino.
La historia se desarrolló en la cancha del Grandoli. Celia conocía bien al entrenador Salvador Ricardo Aparicio, por eso, se atrevió a pedirle con voz enérgica que metiera a Lionel al campo, cuando faltaba un jugador en el equipo. “Te va a salvar el partido” le decía.
La renuencia del timonel le molestaba, pero ella no dejaba de insistir, de levantar la voz cuando era necesario. Al final, lo metió, y marcó dos goles.
“Estaba jugando uno de mis hermanos o mis primos, éramos de diferentes edades y cada uno jugaba en una categoría, en el medio jugaba la 86, que son un año más grande que yo, o no sé bien qué categoría sería”, contó Messi a Olé.
Con una sonrisa, Lio contó que “justo faltaba uno y mi abuela le empezó a decir al técnico, porque lo conocía de toda la vida, ‘mételo a éste. Él le respondió, ‘no que lo voy a poner , mira lo chiquito que es, estás loca, lo van a hacer mal’. Ella decía, ‘mételo, mételo’. Entré, hice un par de cosas, a partir de ahí volvió mi abuela y dijo, ‘cómprale botines, la próxima semana lo llevo a entrenar’. Ahí iniciamos”.
Ella fue la primera representante de Messi, la que creyó que podría sobresalir por encima de cualquier obstáculo. La que lo llevaba de la mano al campo, y a la que tiene presente en sus goles, por eso, cuando marca, el argentino mira hacia el cielo y señala hacia arriba con sus dos pulgares.
“Sobre todo en ese momento la recuerdo a ella, y no solo eso, sino en agradecimiento a Dios por todo lo que me dio, no solo en lo futbolístico, sino en la vida también soy un agradecido a él, pero claro que la recuerdo a ella también”, recordó en una entrevista para La Cornisa.
EL MUNDIAL, UNA META PENDIENTE
Entre los datos sorprendentes conocidos de Messi está aquel día que firmó su nexo con el Barcelona en una servilleta o el tratamiento de las hormonas de crecimiento al que se sometió para hoy medir 1.70, porque dicen los expertos, sin ellas, mediría 10 o 15 centímetros menos.
Su paso en la selección, no ha tenido todos los tintes. Los más gloriosos, la medalla de oro en los Juegos Olímpicos del 2008 y la Copa América que recién se ganó en 2021. Sin embargo, también está el reproche de algunos aficionados por no haber conquistado un Mundial. Esto lo ha llevado a pensar en retirarse de la selección.
“Dependemos de los resultados lamentablemente, por eso el pensamiento de todo este grupo, que llegamos a tres finales, que lamentablemente no las pudimos ganar. Se dijeron muchas cosas de nosotros, pensamos que si no somos campeones se va a venir más fuerte todavía (la crítica), por eso ese mensaje que da esta camada de jugadores”, dijo en el 2018 previo al Mundial de Rusia al programa la Cornisa.
Desde el 2008, cuando Diego Armando Maradona comandó la Albiceleste, Messi usa el ‘10’, antes portó la camisa número 18 o 19. Con ese número tan emblemático, el mismo que uso el máximo ídolo del futbol en Argentina, Lio quiere alzar la Copa del Mundo en Qatar y honrar esa gran herencia.
ZZM