Roger Martínez aterrizó en América con la misión de ser ese delantero que ponga fin a la ausencia de gol que ha acusado el conjunto de Miguel Herrera en el último año. El colombiano llega con una gran ambición, es un tipo decidido a romper barreras, desde niño se acostumbró a ello cuando tuvo que salir de su ciudad natal para no ser víctima de la ola de violencia que azotaba Cartagena.
Hay mucha fe en el delantero cafetalero, un compromiso que no le asusta, cree en su capacidad, porque en su vida se ha rodeado de aspectos y pasajes que le transmitan esa confianza en sí mismo. Dice ser un tipo creyente, encuentra en la Biblia un libro en el cual refugiarse cuando algo no va bien. La película En busca de la felicidad, le marcó y le dejó la enseñanza de que hay que esforzarse y luchar día a día para alcanzar sus sueños.
En Colombia no pudo debutar profesionalmente, fue en Argentina donde tuvo que buscarse el pan, pero en el país sudamericano también le costó ganarse un puesto y peregrinó en equipos como Rácing, Santamarina y Aldosivi, hasta que el dinero asiático le llevó a China para jugar con el Jiangsu Suning donde tuvo su mejor etapa como delantero.
Fue cuando llamó la atención de España y del Villarreal, donde otra vez tuvo pocos minutos, pero ahí el futbol le permitió marcar un gol al Real Madrid, que hasta el momento es el tanto que más recuerda, recibió por la izquierda, recortó al centro y se deshizo de Raphael Varane, después chutó con derecha para vencer al portero Luca Zidane. Una anotación en la que dio muestra de sus condiciones y su instinto en el área.
Cuando América tocó su puerta, Roger no dudó en venir a México, porque a su carrera aún le queda tiempo por delante y a sus 24 años llega con hambre de gloria personal, pero sobre todo colectiva, sabe las Águilas son un club que le puede dar proyección, pero sobre todo estabilidad en su carrera. Quiere hacerse un nombre y demostrar que no se equivocaron en traerle y que puede con el paquete de ser el 9 del equipo más grande de México.
Algo que puede ilusionar al americanismo es que Roger no se define como un delantero estático que espera que la pelota le llegue clara y limpia, si hay necesidad de sacrificarse y de bajar por el balón para que el juego pueda fluir, tendrá esa labor de sacrificio, porque entiende que la prioridad es lo colectivo.
Háblame de tu infancia, te tocó vivir momentos duros, cuando en Colombia había mucha violencia, incluso algunos de tus amigos acabaron perdiendo la vida.
-Fue una época muy difícil, gracias Dios tuve la oportunidad de salir de la ciudad de la que soy originario (Cartagena de Indias) a los 15 años, eso me alejó de las cosas difíciles que estaban viviendo la ciudad y el barrio en ese momento, muchos de mis amigos murieron, otros los mataron y otros terminaron perdidos en las drogas, como otros que se quisieron superar y salieron adelante, a mí el futbol me permitió no pasar por eso.
Qué es la ambición para ti como futbolista
-Siempre querer más, querer ganar en lo que uno se proponga y haga, vine acá porque quiero ganar y estar arriba de todos y eso es lo que motiva.
Los primeras sensaciones son buenas, en el debut dos goles en un amistoso y en el primer juego oficial un gol. Parecen buenos augurios.
-Sí, la verdad me puso muy contento, pero también me dejó un poco amargo por la derrota, pero esto recién comienza, el camino es largo y tenemos un club increíble con grandes compañeros igual que el cuerpo técnico y vamos a andar bien.
Qué se siente ser un foco de atención, esto es lo que genera América.
-Es algo muy lindo que lo estoy disfrutando bastante, la verdad es una experiencia muy bonita para mí, me siento contento de estar acá y lo estoy gozando al máximo.
Qué sabías de este club, porque te ha tocado estar en varios lugares, pero este club es diferente en México.
-La verdad siempre lo miraba y trataba de seguirlo, como es un club tan grande, en muchos países salen partidos o salen noticias y la verdad que siempre que podía me daba cuenta de lo que es América y la verdad que ya estar aquí te das cuenta que esto es más de lo que uno ve.
A qué llega Roger, eres un trotamundos, has estado por Argentina, China, España y ahora México.
-Me motiva lo que es el club, lo grande que es, que siempre está peleando cosas arriba y quiere ganar cosas, eso es una motivación grande para mí y a eso vine, a dar lo mejor, a tratar de ayudar al cuerpo técnico y a mis compañeros a darle a la afición cosas grandes.
Cómo te defines como delantero
-Soy un delantero que siempre busca hacer goles, trato de aguantar la pelota cuando el equipo lo necesita e ir para delante cuando veo la oportunidad, me gusta salir a jugar bastante cuando la pelota no llega arriba.
Vienes como solución a una falta de gol que el equipo acuso en los últimos tiempos, Miguel Herrera llegó a decir que ve en ti a un tipo como Christian Benítez (qepd), un tipo muy letal en el área.
-Es un elogio que diga eso, pero vine a tratar de aportar lo mío, a ser yo mismo y a tratar de hacer las cosas de la mejor manera, a tratar de hacer mi historia y como te digo, a ganar cosas, porque este equipo siempre debe hacerlo.
Preguntando por ti en Argentina, me dan buenas referencias, te ven como un delantero que puede dar mucho en esta Liga.
-Gracias a Dios allá tuve una época bonita ahí y también épocas duras, pero así es el futbol, con momentos buenos y malos y hay que aprovechar y aprender de cada uno de ellos.
Quiénes son tus referentes.
-Siempre miraba a Ronaldinho en todos lados donde estaba, corría para ver sus partidos, pero en Colombia tengo como referente a (Radamel) Falcao, para mí es un delantero increíble, siempre miro sus movimientos y se me hace un gran delantero.
Te has puesto una meta de goles, quizá pensar en el título de goleo.
-Siempre uno se tiene que fijar metas en todo, pero como siempre digo y soy un tipo al que no le gusta hablar mucho, porque hay que demostrar en la cancha y ojalá que sean muchos goles.
Hay mucha fe en ti.
-Es algo que te motiva y exige más, agradezco la fe que pone la gente en mí y trataré siempre de dar lo mejor y para retribuir esa confianza que han puesto en mí.
Hablarás en la cancha.
-Claro, es ahí donde se tiene que responder.