Nicolás Castillo se encuentra ya en casa, una noticia que el americanismo recibió de la mejor manera, porque el chileno lo pasó mal y por ende también sus compañeros, porque siempre se la ha visto como uno más del grupo y se le tiene buena estima. Saber que está fuera del hospital cayó con alegría en el vestuario, aunque el grupo no está viéndose a diario sí hay una comunicación e interacción tanto en redes sociales como en el grupo de WhatsApp del equipo.
Miguel Herrera, entrenador de las Águilas habló de lo que representó la noticia de que el andino ya haya recibido el alta médica. “Es algo que le viene de maravilla a sus compañeros. Saber que Nico está mejorando es importante para el grupo y cuerpo técnico, esperemos que se recupere lo más rápido posible”, comentó el Piojo en ESPN.
Miguel ha estado al pendiente de la evolución de su jugador, es un entrenador que siempre tiene en cuenta esos detalles para mantener la cohesión en el vestuario, añadió que Nico “está muy contento, obviamente es un primer paso, un paso que será difícil por lo que sigue, pero ya dio uno importante que es salir, estar en su casa y ahora comenzará una rehabilitación que nuestros médicos se ocuparán para ver cuál es el siguiente paso”.
El Piojo se refirió al trabajo que está realizado el plantel a distancia y en el que todos han participado de manera activa, porque saben que es la responsabilidad que les toca asumir en estos momentos.
“Todos los días tienen una clase a las 10:30 de la mañana, y en la tarde otra, que la estamos haciendo opcional, pero afortunadamente todos se están metiendo a hacer la doble sesión para mantenernos, sabemos que no es lo mismo, pero cuando esto concluya podamos recuperar la parte física”.
Cambio de ánimo
Este jueves Castillo realizó una transmisión en vivo desde su cuenta de Instagram, el delantero mostró a su hijo bailando y en algún momento también mostró su rostro, se le ve con un semblante distinto por el puro hecho de estar de vuelta en casa, estuvo animado cantando y divirtiéndose con su hijo, en algún momento enseñó una de sus cicatrices. Nico está bien, estable, pero nada ha cambiado en cuanto a los cuidados y vigilancia médica.