Si de echar a perder proyectos hablamos, Cruz Azul se ha convertido en un experto en esta práctica, pues con la reciente salida de Ricardo Peláez como director deportivo de La Máquina, se ha demostrado que no hay respaldo hacia sus integrantes.
Tras esta renuncia del directivo mexicano, aquí te presentamos un manual para echar a perder un proyecto en cinco minutos.
1. No respetar funciones
Ricardo Peláez no tuvo la libertad para elegir al sustituto de Pedro Caixinha, debido a que Víctor Garcés, vicepresidente deportivo de Cruz Azul, decidió que sería Robert Dante Siboldi el nuevo director técnico y no Antonio Mohamed.
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2. Regreso a las viejas prácticas
Víctor Garcés, un directivo que desde hace tiempo no figuraba públicamente, nuevamente se presentó con su cargo como vicepresidente deportivo de La Máquina y comenzó a tomar decisiones por encima de Ricardo Peláez.
El cuñado de Billy Álvarez dejó de tener reflectores cuando supuestamente fue excluido de la Cooperativa Cruz Azul en 2011, por los desvíos que se afirma realizó en su cargo de director jurídico de la empresa.
Además, Garcés ha sido parte de la sequía de títulos, la cual se mantiene desde el Invierno 1997; es decir, hace más de 20 años.
3. Ventilar división interna
Los problemas no se quedaron en casa, y en lugar de tratar resolver la situación internamenmte, Víctor Garcés acudió a uno de los programas deportivos con más rating a nivel nacional, en el que anunció a Robert Dante Siboldi como nuevo director técnico de Cruz Azul; además de mencionar que “no es el director deportivo el que nos va a decir lo que él quiere que sea el club”, haciendo referencia a Ricardo Peláez y el fichaje de Antonio Mohamed.
“Hay un poco de sentimiento en él, porque no se seleccionó al entrenador que él deseaba”, declaró Víctor, luego de que Peláez presentara su renuncia.
En el programa Futbol Caliente de ESPN, ambos directivos se confrontaron, sacando a la luz problemas internos, en los que Peláez dejó en claro que siempre se dirigió directamente con Billy Álvarez, hasta hace unos días cuando aparecieron Garcés y Alfredo Álvarez.
4. Falta de paciencia
Pese a que los resultados en este torneo no son los que se esperaban, Cruz Azul regresó a los primeros planos del futbol mexicano de la mano de Ricardo Peláez, el director deportivo más exitoso en la última década.
En su paso con La Máquina logró una Copa MX y una Supercopa MX, así como llegar a una final de Liga MX en el Apertura 2018, la cual perdieron ante América.
Por lo que al no conseguir rápidamente el título, también afectó en la decisión de dejar ir al directivo, quien mucho tuvo que ver en la solidez con la que hoy cuenta uno de los acérrimos rivales de La Máquina, las Águilas.
5. No hay autocrítica
Pasan los años, directivos y jugadores van y vienen, pero hasta el momento no hay alguien que se haya acercado a la afición para reconocer que se han cometido errores en las elecciones o decisiones que hoy en día tienen al equipo sin identidad. Además, de no haber una disculpa hacia sus seguidores, quienes, torneo tras torneo, siguen apoyando al equipo.
ZZM