Después del trajín que tuvo Cruz Azul entre la Liga y la Copa, hoy ya está de regreso. Y justo a tiempo porque los campeones se van perfilando en esta parte del semestre, cuando una buena racha puede definir el accionar de un equipo en la Liguilla, y eso es lo que está encontrando este equipo.
Porque hay que decirlo, La Máquina de Pedro Caxinha, luego del bajón que experimentó a mitad de la temporada, parece retomar el buen nivel futbolístico que lo encumbró en las primeras semanas. Ayer, con la victoria sobre Lobos BUAP por 2-1 no solo asegura el liderato una fecha más, sino que en el peor de los casos terminará segundo la fase regular, obviamente con las más altas probabilidades de acabar en la cima.
Y esta es una noticia extraordinaria para los cementeros, porque pensando a futuro, que Cruz Azul reciba sus juegos de Liguilla en el Azteca es lo mejor que le puede pasar, pues aquí -de vuelta en la que fue su casa durante su época gloriosa- ha sido un equipo casi perfecto al sumar 25 de los 27 puntos que disputó.
Pero regresando al juego, La Máquina ofreció uno de sus mejores primeros lapsos de la temporada, porque tuvo la pelota, fue vertical y generó varias llegadas claras de gol, aunque un enorme Antonio Rodríguez evitó que se fuera al frente, y luego el único pestañeo defensivo provocó que estuviera abajo en el marcador.
Sí, en un centro al área, Lobos se adelantó de manera sorpresiva con un cabezazo de Leonardo Ramos a los 19 minutos. Antes, Toño Rodríguez había hecho una monumental atajada a un remate con la testa de Édgar Méndez, quien había recibido un centro medido de Elías Hernández.
El 1-0 de la visita destanteó a todo mundo, pero La Máquina se metió de inmediato al juego y los pocos instantes lo pudo empatar en un pase filtrado que recibió con ventaja Elías en el área, pero otro vez apareció Rodríguez para tapar.
Cruz Azul olía el empate, pero Toño estaba en un plan descomunal al grado que en la siguiente jugada hizo una doble tapada a Lichnovsky que se había agregado en un tiro de esquina.
La gran actuación que tenía el portero de Lobos provocó que su equipo se encomendara exclusivamente en él, metiendo a sus once elementos en su propio campo. Así, le dio las herramientas al conjunto celeste para empatar.
Y no tardó la igualada. En un agobio permanente, Méndez sacó un disparo en el área, la zaga rechazó, pero justo le cayó a Cauteruccio, quien ya no perdonó al 32'. A los pocos minutos el uruguayo tuvo la voltereta, con un remate franco con la cabeza, sin marca alguna, pero la mandó a la tribuna.
Pese a ello era cuestión de tiempo para que Cruz Azul se adelantara, pues Lobos ya no ofrecía presión adelante. Y fue el 41, cuando Elías desbordó por sector derecho, llegó a línea de fondo y mandó una diagonal a la exacta llegada de Madueña, quien la mandó a guardar. Con merecimiento el 2-1 ya estaba en el electrónico.
Ya en el complemento La Máquina trato de ampliar la ventaja, pero nuevamente Toño Rodríguez apareció para evitarlo, En los instantes finales y con el marcador tan justo, el cuadro cruzazulino padeció para mantener la renta.
Los centros empezaron a llegar de un lado a otro, con mucha sensación de peligro, pero al igual que contra Pumas, La Máquina soportó bien, dejando atrás el fatídico nerviosismo que tantas veces lo condenó en el pasado.
Así, con un poco de sufrimiento sacó la victoria, la que le permite dormir como líder y entrar como uno de los dos primeros a la Liguilla. La próxima vez que Cruz Azul pise el Azteca, será en el partido de vuelta de su serie de cuartos de final, instancia en la que seguramente partirá como favorito.