Los compromisos comerciales metieron en predicamentos al Rebaño Sagrado.
Chivas sostendrá cinco partidos en trece días, llegando al límite de jugar uno con apenas 25 horas de descanso y un vuelo de más de cinco horas de por medio.
Chivas es un imán taquillero para los organizadores de encuentros en Estados Unidos, por eso le consiguieron tres rivales europeos dentro de la Internation Champions Cup que se jugará en el vecino país del norte, pero se olvidaron de dos cosas del arranque de la Liga MX y que para que haya un cambio de fecha se tiene que tener la autorización del otro equipo, pero Grupo Orlegui dijo no y Chivas tendrá que hacer un verdadero milagro.
La primera parada de esta gira por Estados Unidos es Chicago, donde jugarán contra la Fiorentina, rival de menor jerarquía porque la Roma se bajó y canceló el centro en la ciudad de los vientos.
El sábado siguiente por la tarde en el estadio de los 49s de San Francisco el Rebaño se mide al Benfica, al equipo millonario que acaba de obtener 120 millones de dólares por la venta de João Félix al Atlético de Madrid.
A las 25 horas de este duelo el Rebaño se medirá al Santos de la Laguna en lo que será un duelo especial por el debut y por el regreso de Oribe Peralta a su casa.
“Mi prioridad es la Liga, veremos cómo nos dividimos para tener un buen equipo en los dos partidos”, dijo Tomás Boy, quien sabe que por contrato Chivas debe presentar mayoría de titulares en los amistosos en Estados Unidos, pues se dice qué hay penalizaciones si no se lleva a tal o cuales jugadores.
Santos tuvo sus razones para no cambiar el día del partido e inclusive ya hay boletos a la venta con la fecha del 21 de julio, el Rebaño Sagrado juega el 21 y de inmediato a tomar otro avión para ir a Texas donde jugarán ante el Atlético de Madrid. Un viaje más, más la espera de migración y un solo día para preparar el compromiso ante los Colchoneros.
Después de jugar contra los del Cholo Simeone el Rebaño viajará a Guadalajara y apenas tendrá un par de días para preparar el duelo ante los Tigres.
El plantel está sumamente corto y el calendario se le colapsó al Rebaño, quienes tendrán que jugar cinco partidos en trece días, dos de esos son oficiales, pero los otros tres está el orgullo de por medio.
JMH