Era la noche del domingo 19 de diciembre de 1999, faltaban exactamente 12 días para que culminara el Siglo XX, cuando -en el Estadio Azul- Cruz Azul y Pachuca se medirían para decidir al campeón del certamen de Invierno de aquel año.
Aquella noche, La Máquina se presentaba como el gran favorito para adjudicarse el que sería su noveno campeonato del futbol mexicano, ante los Tuzos, equipo que año y medio atrás había logrado la permanencia y, en ese Invierno del 99', apenas jugaban su primera liguilla en en máximo circuito.
No obstante, el cuadro de la Bella Airosa, dirigido en ese entonces por Javier Aguirre, hizo patente la etiqueta de Caballo Negro, misma que los impulsó durante toda la liguilla de aquel certamen, eliminando a equipos como Monarcas, Toluca (Campeón defensor) y Atlas (Subcampeón del Verano 99'), todo esto para que el Pachuca llegara al Estadio Azul y, con el gol de oro de Álejandro Glaría, venciera a los cementeros.