A veces, la vida es tan similar como la cancha. Marcharte de casa, comenzar un nuevo camino, lejos del confort y seguridad que brinda lo que ya conocemos, ayuda a madurar, a valorar el pasado y a mejorar en cada rubro pendiente. Andrés Iniestra, canterano de Pumas y hoy titular del mediocampo felino, sabe a la perfección lo que representa estar a cientos de kilómetros de su hogar futbolístico, para terminar de curtirse como profesional. Ahora, de vuelta en el Pedregal, no desaprovecha el tiempo.
Un mediodía de miércoles de febrero, Iniestra Vázquez Mellado atiende sin problemas la solicitud de entrevista. Es la primera que da en lo que va del Clausura 2019. Viste unos pantalones cortos, ropa ligera, zapatos deportivos… A simple vista, Andrés es un muchacho de 22 años, con ilusiones interminables y encaminado a conseguirlas. De inmediato se disculpa por la leve demora: “Estaba en el gimnasio, me tocaron unos ejercicios especiales”, dice. Se enciende la grabadora.
-¿Cómo has vivido las últimas semanas, los recientes meses?
Bien, muy contento por empezar a consolidarme en el equipo, pero el cierre del torneo anterior y el comienzo del actual no han sido sencillos. El pasado certamen por la Liguilla y su complejidad y ahora porque los resultados no se nos estaban dando. Se fue David Patiño y siempre le estaré agradecido por ser el entrenador que me debutó en Primera División; sin embargo, el equipo está consciente de qué se tiene que hacer para volver a los primeros planos.
-Bruno Marioni te tuvo en Mérida y ahora en Pumas, ¿qué opinión tienes de él?
A mí me sirvió muchísimo la estancia en Venados con Bruno, me ayudó a mejorar y seguir creciendo como futbolista y persona. Cuando llegué a Mérida, me sentía desconfiado de mis capacidades y Marioni me ayudó para sentirme bien en el campo. El Ascenso me terminó por formar, para volver con una mejor versión con Pumas.
-¿Qué te aconsejaba Bruno cuando te conoció?
Me inculcó el ser más responsable dentro de la cancha, tener un equilibrio en la vida personal, en cuidarme más. Fue como estar en una escuela. La mejor determinación que me llegó en la vida fue salir de Pumas y recalar en el Ascenso y mejor aún, fue coincidir allá con Bruno. Hoy, volvemos a estar juntos, pero en distintas circunstancias. Sé que Marioni nos ayudará bastante.
-Ya encabezas a la actual generación de canteranos emergentes en Pumas…
Siempre he tratado de mantener los pies en la tierra, de trabajar, de brindarme al máximo, de ser quien siempre he sido. Nunca me he sentido alguien importante, siempre he sido uno más en este equipo y creo que eso te quita presiones y ayuda a seguir rindiendo como se debe. La Cantera tiene buenos prospectos y se está recuperando la presencia en el primer equipo.
-¿Cómo te defines como futbolista?
Soy un medio de contención de condiciones más defensivas que ofensivas, aunque me gusta sumarme siempre que puedo al ataque… Me gusta tener mucho contacto con el balón, pero que disfruta no dejar de correr, brindarse al cien. Quiero pelear siempre todas las pelotas.
-En tu posición hay mucha competencia, ¿cómo la vives?
La disfruto bastante. Todos los jugadores que aspiramos estar en cada once titular tenemos claro que si aflojamos en los entrenamientos, pierdes tu puesto. No es sencillo ser canterano de Pumas y titular. Aquí hay gente de calidad y experiencia por encima de mí, que también quiere jugar. Eso nos ayuda a todos para estar al máximo.
-Andrés, ¿con qué sueñas, cuáles son tus ilusiones a futuro?
Hoy, sé que mi presente y futuro inmediato está en Pumas y me concentro en ello, pero sin duda que me veo en la selección mexicana, quiero conseguir cosas importante en este club, ser capitán de esta institución, levantar títulos, devolverle lo que me han dado; me gustaría irme al extranjero. Quiero ser un referente de este club, no pasar desapercibido, ser el mejor de mi posición.
-¿Cuál es el gran objetivo de Pumas en el Clausura 2019?
El equipo está bien, adaptándose al cambio que representó el cambio de entrenador, pero ahí vamos. En los últimos partidos hemos demostrado mayor cohesión y calidad. El objetivo no cambia, en este equipo tenemos que pelear siempre el título.