Anunciado con bombo y platillo, Gastón Silva se convirtió en refuerzo de Puebla para el Clausura 2022 de la Liga MX, pero esta no es la primera vez que tuvo contacto con un equipo de México, pues hace unos años ignoró una trasferencia concretada y dejó a Pumas colgado.
El uruguayo fue oficializado es jueves como nuevo jugador de la Franja, esto cinco años después de que traicionó a los universitarios para fichar por Independiente de Argentina.
Fue en 2017 cuando el conjunto auriazul había cerrado el traspaso del ex seleccionado charrúa con el Torino de Italia, luego de que éste tuviera un paso en el Granada de España, pero pese a lo que se había concretado, el jugador decidió no respetarlo.
De acuerdo con los expresado por el mismo club capitalino, ayudó a Silva a realizar los trámites migratorios para poder jugar en territorio mexicano, por lo que sólo esperaba su presencia para comenzar con las pruebas médicas y la firma de contrato, pero pasó lo contrario.
Con un comunicado que título "De Pumas nadie se burla", la directiva de auriazul se expresó por lo sucedido, pues fue por medio de la prensa que se enteró de que el charrúa no llegaría para el Apertura 2017, cuando todo estaba arreglado.
Tras lo sucedido, Pumas decidió tomar acciones legales para reparar el daño, y al final los felinos ganaron le demanda ante el TAS y recibió casi medio millón de dólares por las acciones del jugador al frustrar el fichaje.
MGC