La llegada del director deportivo Jesús Ramírez y el técnico Miguel González Míchel han dejado algo claro: Pumas apuesta fuerte por volver a los primeros planos de la Liga MX y comenzar con un proyecto que promete recuperar el nivel futbolístico que ha caracterizado a esta institución a lo largo de la historia.
Nicolás Freire llegó a la Ciudad de México para reportar con el club Universidad Nacional e integrarse con sus compañeros, que ya se preparan para el Apertura 2019.
“Agradezco este recibimiento, pero todas las preguntas que quieran hacerme con gusto las voy a responder el día de la presentación”, comentó el zaguero después de ser recibido por personal del club en el aeropuerto internacional de la capital.
Pese a que no dio declaraciones, el argentino mostró su lado más amable y sonrió ante los presentes, además de limitarse a expresar su gusto por llegar a Pumas.
Antes de trasladarse al Pedregal, algunos aficionados se acercaron para tomarse fotografías, e incluso un infante se acercó para posar en una instantánea y le prestó su globo.
Hábil y efectivo por el sector izquierdo de la cancha, el defensor nacido en Corrientes es junto a Martín Barragán y Juan Pablo Vigón uno de los nuevos elementos con la que contará la escuadra universitaria.
Procedente de la Liga Deportiva Universitaria de Quito, el defensa pampero de 25 años de edad llega como una de las cartas pesadas en este nuevo esquema táctico traído por el estratega español, que busca revertir los números entregados el semestre pasado, cuando fueron la sexta peor defensiva del torneo con 26 goles recibidos.
Freire debutó en 2012 de la mano de Argentinos Juniors, conjunto con el que estuvo vinculado hasta 2017. Además de la Liga de Quito, cuenta con experiencia en el balompié europeo y sudamericano, al haber vestido los colores del Club Atlético Torque (Uruguay), PEC Zwolle (Holanda) y Palmeiras (Brasil).