Dentro del mundo del futbol se habla mucho de los estadios, los cuales se convierten en la segunda casa de los aficionados que acuden cada 15 días a alentar a su equipo con una misma ilusión: el campeonato. Los hay de todos tipos, tamaños, nombres, historias, etcétera, sin embargo, los Pumas pueden jactarse de tener una casa muy especial.
El Estadio Olímpico Universitario se encuentra en un área declarada como Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO): la Ciudad Universitaria y fue considerado por el arquitecto estadunidense Frank Lloyd Wright como el "edificio más importante de la América Moderna".
La etiqueta de Patrimonio de la Humanidad se otorgó el 28 de junio de 2007 y se unió a la lista de 35 sitios en total en México que cuentan con esta distinción. El objetivo de este nombramiento es catalogar, preservar y dar a conocer sitios de importancia, ya sea cultural o natural, excepcionales para la herencia común de la humanidad.
El proyecto arquitectónico del Estadio Olímpico Universitario fue realizado por Augusto Pérez Palacios, Raúl Salinas Moro y Jorge Bravo, mientras que cuenta con detalles artísticos como un mural de Diego Rivera ubicado a un costado del recinto.
El hoy estadio de los Pumas fue la principal sede de los Juegos Olímpicos de 1968; los primeros realizados en Latinoamérica y, desde entonces, ha albergado diversos eventos de índole cultural y deportiva tanto nacionales como internacionales.
CECH