Julio Furch partió este martes a la ciudad de Guadalajara para incorporarse a su nuevo club, el Atlas, con el cual firmó contrato por tres años en un traspaso definitivo.
En el aeropuerto, el argentino aprovechó para despedirse de la afición de la Comarca, agradecido por el apoyo recibido y motivado por el reto que se viene por delante, que es ayudar a los Rojinegros a evitar el último lugar porcentual y luego buscar trofeos.
"Es un momento difícil, después de cuatro años de vivir acá, de compartir con la gente momentos buenos y malos, así es nuestra vida. Llega el momento de despedirme, agradeciendo a todos por sus apoyo, el cariño que me mostraron", expresó.
Indicó que su idea siempre ha sido dejar marca en el club donde juega y eso es lo que siempre buscó con Santos Laguna, donde tuvo importantes logros personales y colectivos. "Me habría gustado lograr más cosas, por el club, se merece muchas cosas, más de lo que le pudimos dar, pero me voy conforme, esperando algún día volver".
Y dejar atrás una institución como Santos le duele, pero ve hacia adelante, así que le desea todo el éxito a la institución, a su gente, "perdón por no pasar a despedirlos, es feo (el sentimiento), deseo el éxito que se merece, son gente que trabaja mucho, que se entrega día a día y trata de dar mucho al club, gente que no se ve, gente que trabaja, que se esfuerza. Ojala nos veamos pronto, que nos enfrentemos en la cancha”.
Para Julio es un desafío que dice encarar con muchas ganas, consciente de la situación, "es algo que me motivó, quizá uno trata de pelear siempre y este es un reto, tratar de ayudar a la gente de Orlegi, que me ha dado la mano. Espero cumplir con salvar el descenso, luego conseguir cosas. Es un club grande, de mucha gente, lo preparamos para hacer muchas cosas".
Lo que le llamó bastante la atención, afirma, es el llamado del técnico Diego Cocca para contar con él, ya que después del partido ante Pachuca del repechaje lo llamó por teléfono y le hizo ver la idea que tiene, lo que busca en él. "Eso que te llamen, que te elijan entre muchos jugadores en el mundo, es lindo, motiva".
Furch aseguró que siempre estuvo a gusto en Santos, eso se lo expuso en varias ocasiones a la directiva, incluso dejó pasar ofertas y ahora sintió que esta podía ser una buena posibilidad para él, un desafío.
"Yo dije la última palabra, una decisión a la que te van empujando y traté de asimilarlo y tomar la decisión con la familia, el buscar nuevos retos. Fue difícil por el cariño que sentía".
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