Antonio Briseño, ex futbolista de Tigres, recordó la final de la Copa Libertadores del año 2015 entre el cuadro felino y River Plate, encuentro en el que aseguró que la balanza del arbitraje se inclinó a favor de Los Millonarios para que levantaran un nuevo título.
“Supimos que el arbitraje no era normal cuando te pega esa patada (Alario a Guido Pizarro) y te cargan la cancha, bueno, no que te la carguen, sino tú como árbitro te inclinas a decir: 'no mames, o sea, la presión'. Al final estaba así por el árbitro. No porque él tenga algo a favor de alguien, sino la presión del estadio. Tú marcas una falta y nadie dice nada, pero si es en contra la gente te recrimina. Sí influye mucho el terminar de local”, dijo para ESPN.
El defensa rojiblanco comentó que el conjunto Universitario no dejó de luchar en ningún momento, sin embargo expresó que cuando cayó el 3-0 a favor de River, ya no había oportunidad para ganar el encuentro.
“Tigres nunca se daba por vencido, veníamos de atrás, recuperábamos, remontábamos; siempre fuimos un equipo con mucha resiliencia, pero cuando nos metieron el 3-0 ya no había chance”, sentenció el ex jugador de Veracruz.
La decisión de que Darío Ubriaco, arbitro central de dicho encuentro pitará la final, fue bastante polémica, y es que a pesar de no pasar las pruebas físicas para pitar la Copa América de ese año, si tuvo la oportunidad de dirigir el desenlace del campeonato sudamericano.
FCM