La fase regular del Apertura 2019 de la Liga MX terminó como un torneo histórico para Tigres, ya que lograron romper el récord de liguillas consecutivas calificando alcanzando la onceava y dejando atrás al América que tenía la marca en 10 temporadas seguidas.
Sin embargo, no todo es color de rosa para el equipo universitario, porque en esta ocasión entraron a la Fiesta Grande con una pobre producción ofensiva si es comparada con la de los otros calificados, hasta su archirrival Monterrey que ingresó en el octavo puesto.
Los dirigidos por Ricardo Tuca Ferretti acumularon 26 goles en los 18 partidos que se disputaron, posicionándose como la décima mejor ofensiva del campeonato, siendo André-Pierre Gignac el futbolista con más dianas, sumando 10, que lo colocaron en tercer lugar en la lucha por el campeonato de goleo que obtuvieron Mauro Quiroga (Necaxa) y Alan Pulido (Chivas).
El problema radica en que después de Gignac, para encontrar a otro jugador de Tigres en la tabla de goleadores hay que revisar muy abajo, para ser exactos en la posición 26 en donde se colocó Lucas Zelarayán con cuatro anotaciones.
Las ventajas
Los de la Universidad Autónoma de Nuevo León fueron el equipo menos goleado durante toda la campaña, solamente permitiendo 14 anotaciones en 18 partidos.
También, Tigres tiene a su favor la posición en la tabla que, además de los goles de visitante, es considerada como criterio de desempate, lograron terminar el Apertura 2019 en la tercera plaza con 32 puntos de 54 posibles.
Otro factor que puede beneficiar a los felinos es que cuando entran a la liguilla sufren una completa transformación que, claro, es positiva y se vuelven un equipo mucho más competitivo de lo que fueron durante el torneo.
SFRM